Diputados aprobó rebaja en comisiones de tarjetas de crédito y débito

En una ajustada votación y tras una sesión de casi 16 horas, la Cámara baja aprobó la iniciativa que promueve una reducción gradual de las comisiones con 134 votos positivos, 34 negativos que correspondieron al Frente para la Victoria, y 7 abstenciones.

En la votación en particular de la propuesta, el kirchnerismo abandonó el recinto y dejó la sesión sin quórum lo que hizo peligrar la sanción de la propuesta, y obligó al propio Sergio Massa, jefe del Frente Renovador, a salir a los pasillos a llamar a sus propios legisladores para continuar con el debate. 

Sectores de la oposición cuestionaron la propuesta antes de que llegara al recinto porque en el tratamiento en comisión se reemplazó un proyecto de similares características que ya tenía la media sanción del Senado y que proponía reducir a 1,5 por ciento las comisiones para operaciones con tarjeta de crédito y sin costo para las de débito.

En cambio, la propuesta aprobada impulsa una reducción gradual a tres años con una tasa de 2,6 para 2017, 2,3 para 2018 y 2 por ciento para 2019, según explicaron fuentes parlamentarias.

El macrista Daniel Lipovetzky defendió la iniciativa al sostener que apunta a que "el mercado de la adquiriencia no esté monopolizado por una sola empresa" en referencia a la firma Prisma, propietaria de Visa Argentina.

En este contexto, el legislador espera que la sanción de esta norma "genere mejores condiciones de competencia" porque "las comisiones son muy altas" y estimó que "va a repercutir en una mejora para los comerciantes y esperamos que repercuta en una baja de los precios".

"Estamos proponiendo que cada empresa tenga más de una empresa de adquiriencia, estamos pensando en los consumidores", dijo.

El ex ministro de Economía y actual diputado por el Frente para la Victoria Axel Kicillof sostuvo que el proyecto dictaminado con la firma de Cambiemos es de "resultado desconocido" y acusó al oficialismo de querer aprobar la propuesta en comisión "a carpeta cerrada".

Para el legislador, la propuesta tiene "oscuros intereses encerrados que no lo pueden explicar ni los autores".

El salteño Guillermo Durand Cornejo, aliado macrista en la Cámara baja, advirtió que "al consumidor no le va a llegar un centavo de la rebaja" al tiempo que protestó porque "no se le pidió la opinión a ninguna de las asociaciones de consumidores".

Por su parte, la jefa del bloque por el Frente Renovador, Graciela Camaño, afirmó que "lo que están haciendo con este proyecto es un fraude, están defraudando la confianza de la gente", por lo que pidió que se ponga a la Cámara en comisión para tratar el proyecto del Senado.

Previamente, el presidente de la bancada kirchnerista, Héctor Recalde, propuso que regrese a comisión ante la falta de acuerdo, pero decidió bajar la moción ante la iniciativa de Camaño.

Lo cierto es que tras un cuarto intermedio de cinco minutos solicitado por Massa, se pasó directamente a votar el proyecto del oficialismo y cuando el kirchnerismo se retiró del recinto fue José Ignacio De Mendiguren quien volvió a su banca para recuperar el quórum y terminar con la votación en particular de la propuesta.

Al salir del recinto, tanto Massa como Camaño, justificaron su decisión de quedarse en el recinto porque "no queríamos quedar pegados" ante la opinión pública de que si se caía la ley iban a beneficiar a los bancos.

Sin embargo, la propuesta ahora deberá esperar hasta el próximo año para que sea tratada por el Senado, ya que no fue incluida en el pedido de sesiones extraordinarias firmado por el presidente Mauricio Macri.