La yerba marte sufrirá otro aumento

La yerba mate podría sufrir nuevos incrementos. Sectores industriales solicitarán al secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, que se ajuste el valor que reciben del sector comercial como respuesta al aumento de la materia prima que podría resolverse en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) este martes. Desde el directorio del INYM, en cambio, aseguran que eso no debería significar un aumento del precio final.

Actualmente, los valores de la hoja verde está en los 3,6 pesos y la hoja canchada en 13,3 pesos, según los valores establecidos. Sin embargo, fuentes del mercado aseguran que las cifras están ligeramente por arriba, alrededor de los 4 y 15 pesos, respectivamente.

Este martes se realizará una nueva reunión para definir los precios de toda la cadena yerbatera, según establece la ley 25.564, sancionada en 2002. En caso de no haber un acuerdo entre todos los directores del INYM, el ministerio de Agricultura de la Nación podría laudar; es decir, definir de manera unilateral los valores.

Ante los incrementos en la materia prima, sectores industriales pedirán al secretario de Comercio Interior modificar el precio al público, como consecuencia del aumento de costos. Sin embargo, esto no es compartido por otros integrantes del directorio del IN/YM, como Marcelo Stockar, quien le dijo a minutouno.com que "la cadena comercial no tiene excusa para trasladar al consumidor (el aumento). Ellos tranquilamente lo pueden absorber", y agregó que la materia prima "significa menos del 10% del costo" del producto final.

Stockar apuntó sus cañones contra el sector comercial, a quien acusó de "remarcar y no querer tocar sus márgenes". Según su opinión, los comercios "no tienen por qué aumentar, con los precios que tienen pueden pagar tranquilamente" los valores que piden desde el sector productivo.

El presidente del Instituto, Luis Prietto, aclaró a minutouno.com que lo que solicitarán es que el sector comercial le pague más al sector industrial, pero eso no debería implicar que el consumidor sufra un alza en el precio del producto terminado. "Con los actuales valores en góndola tranquilamente se podría absorber" dicho incremento, que rondaría el 16 por ciento, señaló.