Boca ganó con lo justo, pero cuidó el cero en su arco para definir la llave

Le ganó 1 a 0 a Cerro Porteño con el gol de Emanuel Gigliotti cuando faltaban siete minutos para el final del partido

Mejor tarde que nunca, Boca...

Con sufrimiento y trabajando más de la cuenta, el equipo de la Rivera logró sacar una ajustada ventada en el partido de ida por los cuartos de final de la Copa Sudamericana ante Cerro Porteño, pero lo más importante es que mantuvo el arco en cero pensando en la revancha. 

Sin sufrir mayores sobresaltos, pero desaprovechando las pocas jugadas que generó en tres cuartos de cancha, el equipo de Arruabarrena encontró la diferencia en el banco de suplentes, apelando al ingreso de Emanuel Gilgiotti.  

Durante todo el primer tiempo, el Xeneize intentó llevar las riendas del partido. Sin embargo, el ordenado planteo del equipo de Astrada hizo que las intenciones quedasen sólo en eso...

Recién en el segundo tiempo, cuando la figura del arquero Barreto se fue agigantando, Boca logró la merecida diferencia con la ajustada definición de Gigliotti, quien se entrometió en diagonal hacia el arco y logró empujar la pelota entre un defensor paraguayo y el arquero luego de un centro a media altura. 

Con siete minutos por delante, Cerro no pudo reaccionar y el buen planteo que había mostrado durante todo el partido se terminó cayendo en una jugada. 

En una semana se viene la revancha, después de este importantísimo 1-0. Y de reojo, todos ya miran a River porque habría cruce en semis. 

 El mérito de Boca fue nunca darse por vencido, atacar hasta el final, no rendirse y cuidar el cero, fundamental en estas series mano a mano. Y sacó provecho de Gigliotti  al empujar la única que tuvo. 

Si bien la lleve está abierta, el panorama es optimista.