“Confío en Estudiantes”

Tomás Bulat, economista top de Argentina y fanático del Pincha, dialogó con Hoy en la previa del clásico. La curiosa historia de vida que lo vinculó con la gloria albirroja, el recuerdo de Dubai, aquel 7-0 y mucho más

"Economista de profesión, periodista de oficio y docente de alma”. Así se describe en su página web Tomás Bulat, dueño de un currículum envidiable y una personalidad emprendedora, combinación que lo ha hecho justo receptor de numerosos premios y distinciones.

Es Licenciado en Economía, tiene un posgrado en Desarrollo Económico de la Universidad Federal de Río de Janeiro, está graduado en Comercio Exterior de la Fundación Banco de Boston y posee un Master Science in Economics de la Universidad de Londres. Además, ya escribió dos libros.

En el plano periodístico usó su capacidad pedagógica para tornar accesibles cuestiones de su especialidad de alta complejidad, lo que lo ha consolidado como una voz muy escuchada. En un contexto donde los recursos económicos escasean para gran parte de la sociedad, producto fundamentalmente de la nefasta gestión kirchnerista, es imprescindible el estudio de Bulat para anticipar escenarios y dar consejos útiles. Hasta el momento, suma dos estatuillas de Martín Fierro de Cable (en 2012 por Mejor Programa Económico y en 2013 por Mejor Labor Periodística) y acaba de ser ternado por APTRA para una nueva edición, en este último rol.

En este mundo de números que lo rodea, su memoria guarda un lugar muy especial para uno de cuatro cifras, 1968, el año más glorioso de la historia de Estudiantes de La Plata. 

¿Cuándo comenzó el amor por Estudiantes?

En 1968, cuando yo apenas tenía tres años y recién había regresado, de forma temporal, a la Argentina. En ese momento, Estudiantes se estaba consagrando campeón del mundo, tras la victoria ante Manchester United. Y mi papá, que es croata, me regaló la camiseta del equipo. Nunca más me la saqué. El Pincha es así, una vez que lo conocés, no podés dejarlo.

En tu adolescencia también ganó títulos el club

Sí, recuerdo los duelos con Independiente de principios de la década de 1980. Un dato llamativo es que yo viví en Ecuador hasta 1982, por lo que mi retorno al país coincidió con otra etapa gloriosa, por la conquista del Metro (1982) y el Nacional (1983).

¿Los compromisos laborales te permiten ir a la cancha?

Se me complica bastante, pero voy de vez en cuando. En los momentos importantes, obviamente no fallo. 

¿Qué partido nunca vas a olvidar?

Y… lo de Dubai no lo vivís todos los días. Siempre me interesó conocer esa ciudad desde el punto de vista económico pero no imaginé que Estudiantes jugaría ahí una final del mundo. Fue una experiencia inolvidable. Si bien el golpe fue duro porque estuvimos muy cerca de ganarle a Barcelona, recuerdo el placer de ver la cara de incredulidad de todo el mundo durante 87 minutos. No podían creer lo que estaba haciendo Estudiantes. Nunca insulté tanto como cuando Messi hizo el segundo gol.

¿Y los clásicos cómo los vivís?

Trabajé un año en La Plata y entonces entendí el verdadero significado. El que perdía, al otro día faltaba al trabajo. Hoy, al no vivir allí, se siente de una forma diferente pero tengo un amigo de Gimnasia, con el que siempre nos gastamos en este tipo de enfrenamientos, y varios de Estudiantes que están en los medios, como Mauro Szeta. 

¿Un derby en especial?

El 7-0 no tiene rival. No pude ir a la cancha ese día pero veía que caían los goles uno tras otro y no podía creerlo. 

¿Cómo ves la serie copera?

Tengo fe en que vamos a pasar de fase. Confío en Estudiantes. El empate en el estadio de Gimnasia fue positivo.

 ¿Qué análisis hacés de este Estudiantes?

Me gusta el DT y veo una satisfactoria apuesta a mediano plazo. El club está ordenado y pienso que en dos años va a volver a estar bien arriba. Estudiantes suele tener picos exitosos en los que gana títulos importantes. 

Entonces ves buen futuro pase  lo que pase en las elecciones

Las dos opciones son buenas porque veo transparencia de ambos lados. De la gestión actual resalto el hecho de haberse presentado en Bolsa (foto principal), eso marca claridad, no puede hacerlo cualquier club. Y Verón tiene mucha visión internacional y da gran importancia a las divisiones inferiores.

¿Una satisfacción como hincha?

Haber tenido el placer de ver a Estudiantes con mis hijos en la cancha. Además, por suerte, las dos veces ganamos, así que puedo volver a llevarlos, jaja. Igualmente no tuve suerte porque el mayor es de River y los otros dos de Boca. Nadie siguió mis pasos pero ellos se lo pierden.