El chico que se hizo grande en Estudiantes

A 48 horas del debut en la Copa Sudamericana frente a Belgrano, Augusto Solari valoró la decisión de pasar de River al Pincha, en donde encontró la continuidad y los resultados que se le negaron durante su etapa en el Millo

Para cualquier jugador nacido y formado en un club tan grande como River, cambiar de equipo por no encontrar protagonismo puede ser tomado como un proceso de transición en su carrera profesional. Con el paso de los meses quedó demostrado que emigrar a Estudiantes fue la mejor decisión que tomó Augusto Solari desde que se convirtió en profesional.

En La Plata encontró el reconocimiento que debía compartir en Núñez. En el Country es cobijado con elogios y protegido con consejos que lo hicieron crecer. Hoy dejó de ser un chico que intentaba consolidarse y pasó a ser un titular indiscutido que buscará ganar alguna de las tres competencias que deberá afrontar el Pincha en la próxima temporada, para luego pensar en regresar a su club hecho un hombre formado y maduro. 

Ayer, en la tranquilidad del predio albirrojo, el volante recibió al diario Hoy y analizó los objetivos del equipo.

—¿Se torna fastidiosa la pretemporada por las postergaciones que está teniendo el torneo?

—La verdad es que estamos con muchas ganas de comenzar el campeonato. La pretemporada se hizo un poco larga, pero sirvió para ir puliendo cosas e ir mejorando. Hicimos un buen trabajo físico, pero ya tenemos ganas de que empiece el torneo. 

—¿Ilusiona la racha positiva de empates y victorias?

—El equipo está muy bien porque ha hecho una buena pretemporada. Hemos tenido muy buenos resultados, pero lo que importa es que consolidamos el funcionamiento. Esperamos seguir mejorando en el día a día para poder continuar consiguiendo buenos resultados. 

—¿Son conscientes de que la gente va a pedir un logro después de pelear como lo venían haciendo?

—El equipo viene trabajando desde hace tiempo. No hay que ponerse metas a largo plazo, pero sí evolucionar partido tras partido. Ese creo que es el único camino para llegar a lo más alto.

—¿Qué es Belgrano de Córdoba en el camino de Estudiantes?

—Es un equipo diferente desde lo táctico con respecto al que venía jugando con el cuerpo técnico anterior. Tiene posesión de pelota y no espera tanto al rival. Me imagino que se va a dar un lindo partido.

—Hasta ahora Vivas cambió mucho por la izquierda del equipo, pero no tanto por la derecha. ¿Te sentís respaldado y consolidado dentro del esquema del técnico?

—Estoy muy contento con estos primeros seis meses que llevo en el club. Estudiantes ha superado mis expectativas. Sabía lo que era, pero desde adentro me di cuenta que es mucho más. He ido creciendo en cuanto a lo futbolístico y pude jugar casi todos los partidos. 

—¿Qué es Vivas para Solari?

—Un técnico que se preocupa tanto por los más grandes como por los más chicos. Se interesa por la parte futbolística y también la parte personal y eso habla muy bien de él. 

—Viendo como le fue a River en el primer semestre, ¿valorás aún más la decisión de haber llegado al Pincha?

—River está en una etapa de recambio. Aún no me puse a pensar si fue mejor venir. Pero estoy agradecido a Estudiantes porque me abrió las puertas. 

Al abuelo, con cariño

Hace medio siglo, en 1966, la ahora inexistente revista Sport retrataba en su tapa a Jorge “El Indio” Solari con la camiseta de River. Augusto Solari es nieto (no sobrino ni hijo) del Indio, que jugó en el Pincha en 1970. 

La historia de los Solari es extensa en el fútbol, ya que Eduardo, el hermano menor de Jorge, dirigió a Estudiantes en dos ocasiones y es el papá de los futbolistas Esteban Solari, David Solari y Santiago Solari, quien hoy trabaja como técnico en el Real Madrid. 

Liz Solari, la modelo de 33 años que rompió corazones en el ámbito del fútbol, también es pariente de Augusto, pero es hermana de Santiago, Esteban y David Solari, y la única hija de Eduardo Solari, hermano de Jorge, quien es el abuelo del jugador del Pincha. 

Los hermanos Jorge y Eduardo Solari, además, fundaron en 1975 el Club Renato Cesarini en Rosario, que formó a jugadores como Javier Mascherano, Roberto Sensini, Martín Demichelis o el propio Joaquín Correa, por quien el Pincha cobrará derechos solidarios de formación ante el reciente pase al Sevilla de España. 

Lo cierto es que los rasgos de los Solari son inconfundibles.