Infantino paga los votos de la elección

El titular de la FIFA recompensó a los continentes que lo promovieron como presidente: confirmó la Copa del Mundo de 48 equipos a partir de 2026. “Un Mundial no es solamente Europa y América del Sur”, dijo. Los intereses millonarios del organismo

En 1930, en Uruguay, se disputó la primera Copa del Mundo de la FIFA con apenas 13 seleccionados. En Suiza 1954, la cifra se extendió a 16, en España 1982 se amplió a 24 y en Francia 1998 pasó a 32, un número que parecía inamovible. Sin embargo, dentro de nueve años, 16 equipos más tendrán la posibilidad de pelear por el trofeo más preciado.

Ayer, en la tercera reunión del Consejo Consultivo de la FIFA en Zúrich, el organismo aprobó la participación de 48 seleccionados a partir del Mundial de 2026, cuya sede no está fijada, pero que se llevaría a cabo en América del Norte.

De esta manera, el presidente Gianni Infantino comenzará a recompensar a las federaciones que lo apoyaron con sus votos el año pasado para ganar las elecciones, ya que en la segunda ronda sacó una gran ventaja principalmente por los miembros africanos, que se verían favorecidos con un aumento de 4,5 plazas.

En cuanto a la proporción de incremento de cupos para clasificar, tanto la UEFA como la Conmebol se verían perjudicadas. Los europeos, que tienen 13, pasarían a 16, mientras que Sudamérica, hoy con 4,5, subiría a 6,5.

“Un Mundial no es solamente Europa y Suda­mérica”, dijo Infantino, dejando en claro que, después de los hechos de corrupción que salpicaron al fútbol, especialmente en el Viejo Continente y en América, las otras federaciones ganarán terreno y explotarán aún más el deporte más popular del planeta.

El desarrollo de la competición

En cuanto al formato de disputa, habrá 16 zonas de tres equipos cada una, y las dos mejores selecciones de cada grupo avanzarán a 16avos, iniciándose la etapa de eliminación directa hasta la final. El camino al título implicará entonces, al igual que ahora, siete partidos. La cantidad de encuentros se incrementará de 64 a 80, pero la duración del torneo no superará los 32 días. 

Un dato no menor y llamativo es que se evaluará descartar los empates. Es decir, si un encuentro termina igualado en los 90 minutos, se definiría por penales.

Crecerán las ganancias

Otro de los principales motivos de este cambio, además del desarrollo e integración de los continentes, es el rédito económico que generará. Los derechos televisivos aumentarían en US$ 505 millones, mientras que los derivados de la mercadotecnia (contratos comerciales, merchandising) se incrementarían en US$ 370 millones.