Las mujeres sorprenden al mundo futbolero

La ciudad ya instaló  un lugar formal y competitivo para la gran demanda de ellas, las que lucen botines y juegan por amor a la camiseta. Las historias de algunos clubes

Desde LIFIPA se golpean el pecho y afirman: “Fuimos los primeros en organizar el fútbol infantil”. “Así como nació en 1976 la primera liga para nenes, también fuimos pioneros en la rama femenina”, dijo Hugo Sueldo, directivo de impronta amateur, inclaudicable, soñador.

Desde la Liga Amateur Platense, por su parte, el orgullo es inmenso. “Hace dos años se realizó el torneo inaugural, dividido en varias zonas. Ahora ya se juega la tercera edición, con los equipos distribuidos por niveles. Pensamos una logística a partir de la cual los clubes se vean beneficiados”, apuntó Eduardo Castagnani, un citibelense paciente, bohemio como los dirigentes de antaño.

La pasión se transmitió de boca en boca, las jugadoras empezaron a ser solicitadas por otros equipos y hoy no son pocas las que acuden a disputar los dos torneos (el reglamento local lo permite). El máximo exponente tal vez sea el Argentino Juvenil Club, único participante en ambos certámenes.

Es fútbol puro. A los clubes de la periferia, donde hay más campos abiertos, llegan jugadoras con mentalidad y condiciones para ganarse el piropo de cracks. También están aquellas de los conglomerados más urbanos, menos propensas a tirarse a la gramilla y no quejarse por un raspón.

Pudieron escoger lo que les gustaba, y ya la sociedad no las mira de reojo, sino que admira su elección para ser felices ¡en una cancha! Con ingredientes esenciales: arbitraje, dirigentes que les buscan la indumentaria, un técnico que las ordena, un club que las contiene.

Juegan cada domingo. La Liga Amateur, que tiene Primera y Reserva, programa sus jornadas en cinco canchas (se juegan cuatro partidos en cada una y hay dos cotejos más en un quinto escenario). LIFIPA tiene más categorías, siete, aunque algunos clubes presentan menos, esperando la organización completa.

Cada institución cuenta con motores espirituales, como “Betty” en Argentino de City Bell. Se trata de una exjugadora de 48 años que hace mucho se acercó con la ilusión de promover “un espacio en la sociedad para que las chicas puedan participar”. Hoy, en tanto, sigue mirando con visión de futuro: “Le estoy proponiendo a LIFIPA que arme un Senior”.

La fuerza con la que vienen es asombrosa; tanta, que el estirón fue notable en números: en 2011 solamente había dos equipos en City Bell, más el representativo Municipal. Los clubes, que primero habían sentido que el fútbol femenino era un “gasto”, de a poco se convencieron del valor social y la atracción vecinal, sintiéndose más confiados para absorber esta disciplina.

Voces de vestuario… femenino

Milagros Cortés (28): “Jugué siempre. A los nueve años le hice poner una escuelita a mi tío, en Villa Rivera. Me dijo: Si me conseguís el equipo, la armo. Empezamos, hasta que me fui a Estudiantes, pero a los 15, por la visión social existente sobre el fútbol femenino, dejé. A los 22 volví al club y jugué un tiempo, hasta que me anoté en la Liga: primero en Argentino Juvenil y ahora en Nueva Alianza, donde llevo tres torneos”.

Soledad Benítez (26): “Soy arquera y volante. De chica le usaba los botines a mis hermanos. Jugaba los torneos de El Campito, donde me contacté con Leo Ferrante, quien es nuestro técnico en Talleres”.

María Soledad Castanheira (29): “Además de jugar, soy profesora de Educación Física en Centro Fomento Los Hornos, y entrenamos tres veces por semana. Cada vez que mi papá, que es presidente de un club del Interior, convocaba a un técnico nuevo, yo me metía y le decía: Acá tenés al número 9”.

Agustina Plazotta (23): “Empecé a los 18 años a competir, pero juego desde los 10, en el barrio, con mis amigos. Pasé por otros deportes pero siempre quise jugar al fútbol, es lo que más deseaba. Además de Argentino Juvenil, ahora estoy en la Reserva de Villa San Carlos”.

Tatiana Zambosco (30): “En Alianza somos 18 chicas entre Primera y Reserva. Además, hace tres semanas empecé a ayudar en una escuelita a la que ya pueden sumarse nenas de 6 a 11 años”.

Fabiana Wysoczanski (46): “Jugué en Estudiantes, Gimnasia y El Porvenir en la década del 90. Luego dejé, pero en 2013 retomé este juego hermoso. En mi trabajo como docente de la Facultad de Ciencias Económicas, una vez comenté que mi hobby es el fútbol y que lo practico, lo que generó sorpresa. Claro: no se imaginan que cambie la habitual vestimenta por el pantalón cortito y el pelo atado. Para jugar al fútbol, no me importa ponerme coqueta”.

Sofía Saleme (16): “Vine de Tucumán, donde jugaba con los varones. Hace poco me tocó representar a la Selección de LIFIPA en Mar del Plata con un rejunte de otros clubes, y no sabíamos que íbamos a pasarla tan bien y llegar tan lejos. 

Soledad Sofía (38): “Llegué hace cuatro años al CF Los Hornos como mamá y, por la emoción misma de las madres, se pensó en armar el fútbol femenino. Trabajo en un organismo de derechos y cambié la visión de mucha gente, ya que hay todavía pensamientos retrógrados respecto a cómo somos vistas”.

Equipos

- 26 son los clubes de la Liga Amateur anotados. En la A: Iris, La Plata FC, Tolosano, San Lorenzo, Tricolores-UNLP, Alianza, For Ever, Talleres, Everton, CRIBA, Independiente (A), Comunidad Rural y Arg. Juvenil. En la B: San Martín, Brandsen, Estrella, ADIP, Las Malvinas, CF Los Hornos, Villa Lenci, Curuzú, Peñarol, Unidos de Olmos, Montoro, Alumni y Porteño.  

- 11 son los equipos inscriptos en LIFIPA: Argentino Juvenil, Athletic FC, Gimnasista de LH, Los Dragones de VE, San José, Catella, Nuevo Edén, Toronto, EMMUF, Banda Roja y Los Tolosanos. Las categorías son Alevín (2008-2009 y 2010), Promocional (2006-2007), Preinfantil (2004-2005), Infantil (2002-2003), Cadetes (2001-2000), Juveniles (1997-1998-1999) y Primera (1996 en adelante).