Nuevo portazo de Ahumada, entre negociados y sospechas

El presidente de Estudiantes de San Luis, Carlos Ahumada, presentó su renuncia y la participación del club en el torneo de la Primera B Nacional es una incógnita. 

Esta no es la primera vez que el empresario queda envuelto en escándalos y sospechas por sus manejos en los clubes. Los primeros pasos los dio en México, en el León FC, franquicia que compró y manejó durante tres años. Luego desembarcó en el Santos Laguna: en este periodo Ahumada estuvo detenido entre 2004 y 2007, luego de que saliera a la luz un video en el que aparece entregándoles dinero a políticos cercanos a Andrés López Obrador, por entonces jefe de Gobierno de la Ciudad de México y candidato a presidente. 

Más tarde llegó el turno de los negocios en el fútbol argentino a través de la gerenciadora Ateliers SA, tomando las riendas de Talleres de Córdoba. El final fue escandaloso, con el equipo en el Federal A y el empresario denunciado por su vínculo con la barra brava.

El siguiente paso lo dio en Juventud Unida Universitaria de San Luis, de donde también se despidió con problemas financieros, hasta que arribó a Estudiantes, donde ahora también fue acusado de corrupción.