“Vuelvo a Gimnasia con la idea de jugar y dar lo mejor”

Tras once años fuera del país, Lucas Lobos regresó al club que lo vio nacer con la expectativa de poder formar parte del equipo de Gustavo Alfaro. “El tema de la rodilla lo voy llevando, quiero estar bien cuanto antes”, aclaró el volante

Tanta insistencia finalmente tuvo su recompensa. Es que, tras once años fuera del país, desarrollando su carrera en Cádiz de España, Tigres y Toluca de México, Lucas Lobos regresó a Gimnasia. 

A bordo de una impactante camioneta blanca llegó el volante, vestido con jean, remera, camisa al tono y zapatillas rojas. El jugador nacido en el barrio de Olmos fue uno de los primeros en arribar al predio de Estancia Chica y lo hizo acompañado de toda su familia. Después de saludar a los empleados y recibir la bienvenida de sus nuevos compañeros y el cuerpo técnico, Armi entrenó y, luego de esperar al presidente Daniel Onofri por un par de horas, firmó el contrato. Luego hizo su presentación ante la prensa.  

—¿Cuáles son tus sensaciones en este regreso?

—Estoy contento por este momento, me lo venía imaginando desde hace años. Estoy agradecido a la institución que me dio la posibilidad de comenzar mi carrera y ahora me da la chance de poder finalizarla. Estoy orgulloso de eso, ahora me toca ponerme bien y disfrutar. 

—¿Cómo estás desde lo físico?

—Una cosa es trabajar solo y otra con un grupo. Estaba yendo al gimnasio, pero el verdadero entrenamiento es el día a día en el campo. Tengo una lesión que arrastro desde hace tiempo, aunque estoy con ganas y actitud para jugar. Por momentos me molesta, por otros no, lo trabajaremos con los médicos. Espero que en dos semanas pueda estar a disposición.  

—Alfaro dijo que nadie tiene asegurado el puesto... ¿La vas a tener que pelear?

—Entiendo a Gustavo (Alfaro), tuve una charla en la que le hice saber mi posición y él la suya. Estoy agradecido por haber tenido esa conversación. En ningún contrato existe una cláusula para jugar. Vengo con la idea de entrar a la cancha y dar lo mejor, por eso quiero ponerme bien física y futbolísticamente, para convencer al técnico. Espero ganarme un lugar. 

—¿En qué posición te imaginás dentro del equipo?

—Trataré de buscar alguna manera de jugar. Últimamente lo hice de doble cinco más ofensivo y también de mediapunta. De todas formas,  lo importante es estar bien, con ganas, tengo una motivación muy linda. Hay que respetar los procesos, pero veía a mis compañeros con la pelota y tenía unas ganas bárbaras de meterme. Sin embargo, insisto en que tengo que ir despacio, no apresurarme, es importante tenerlo en cuenta en estos momentos. 

—En once años, el fútbol argentino cambió: ¿necesitás adaptarte?

—Por observarlo, tengo una idea de lo que es. Obviamente que cambió mucho, es un poco mas físico, con roce y hay que correr mucho. Espero adaptarme rápidamente. El grupo en el que estoy me va ayudar un montón, porque se nota que hay buena gente. 

La familia, los amigos y el barrio...

Más allá del sentimiento y el deseo de retirarse con la camiseta de Gimnasia, uno de los principales motivos que impulsó la vuelta desde México fueron los afectos. 

“La verdad es que tuve una carrera muy larga en México, país al que estoy muy agradecido. Llega un momento en que te preguntas qué hacer porque te das cuenta que estás lejos de la familia, el barrio y los afectos. Aunque acá arrancamos de cero, estamos felices”, comentó. 

“En algún momento no venía jugando, dejaba atrás una operación y es como que te sentís solo, por eso el apoyo de la familia es muy importante”, cerró. 

Noticias Relacionadas