Dalia Gutmann: “El stand up es un modo de vida”

Ella es locutora y autora de dos libros. Además, se convirtió en un ícono del humor femenino. En diálogo exclusivo con Hoy, la comediante habló sobre su incursión en el teatro y sus relaciones familiares

Es divertida, relajada y enérgica. Dalia Gutmann tiene el don de transformar cualquier anécdota en un monólogo perspicaz y posee una sonrisa capaz de conquistar el mundo entero. 

A principios del año 2000, incursionó en el stand up y decidió que este género sería su vocación en la vida.

En una entrevista íntima, la comediante se expresó sobre la profesión, la producción de obras literarias y la vida en familia.

—¿Por qué elegiste hacer humor? ¿Qué te llevó a contar tus experiencias en este género?

—Me pareció fascinante ver a una persona que se sube al escenario y abre su mundo interior para compartir un monólogo propio frente a un público desconocido, transformando una experiencia cotidiana en algo cómico.

En la actualidad puedo vivir de esto, pero al inicio no lo imaginé. Hoy digo que encontré una vocación en el stand up, un modo de vida.

—¿Cómo se dio la posibilidad de escribir un libro?

—Fue algo que siempre estuvo dando vueltas en mi cabeza por las ganas de decir y contar cosas. Soy muy del diario íntimo que ya no existe. En mi computadora tengo muchos archivos donde guardo cosas que escribo, y me encanta. Por ahora, produje dos libros y tengo en mente lanzar un tercero. 

Me encanta el teatro como también  la chance de la escritura en la soledad de mi casa. La palabra hablada es maravillosa y el libro tiene la mística que queda ahí para siempre. 

—¿De qué manera equilibrás la maternidad, el trabajo y la pareja?

—Equilibrio es la palabra clave que buscamos todo el tiempo y cuesta encontrar, o entender. 

Pertenezco a una generación en la que estamos acostumbradas a hablar de lo negativo de tener hijos. En mi caso es diferente porque la maternidad es lo mejor que hice, lo que más me gusta, el lugar donde me siento más feliz. Mis niños aportaron mucha alegría a mi vida y creo que, desde que fui mamá, me convertí en una persona más lúdica, sana y espontánea. Una vez que ingresás al “mundo mami”, hacés malabares cotidianos y cambiás tus rutinas porque la logística familiar es complicada, pero a la vez muy disfrutable. 

La pareja es un estadio que me encanta. Me gusta la persona que elegí y me acompaña. Nos divertimos y el  material de mis monólogos está inspirado en esta convivencia. Estar en una relación es complicado, pero, si uno la sabe llevar, es muy lindo ver la evolución del vínculo.