Las Piñas: “La Plata tiene todo”

El dúo femenino de surf rock platense se prepara para su segunda gira por Estados Unidos. Una de las bandas jóvenes con más proyección, en diálogo con diario Hoy

En tiempos de romper con viejos prejuicios del rock, Las Piñas viene pisando fuerte. El grupo, conformado por Sofía Cardich en guitara y voz, y Antonela Perigo en batería y coros, tiene solo dos años sobre los escenarios y ya visitó  varias ciudades de Estados Unidos, invitado por un sello de ese país. Este año volverá a viajar y tendrá la posibilidad de compartir escenario con figuras de la talla de Molotov, Julieta Venegas, Bomba Estéreo y otras importantes bandas de Latinoamérica. Antes de sus últimas fechas argentinas previas a la gira -el viernes en Capital Federal y el sábado en la ciudad-, Antonela Perigo charló con este medio e hizo un repaso por el camino musical que la banda está emprendiendo. 

—¿Cuándo y cómo nació Las Piñas? ¿Cuáles fueron las influencias que las llevaron a elegir tocar surf rock?

—Nació en febrero de 2015. Un verano muy caluroso. Pasábamos el tiempo libre en el garaje de Sofía. Yo recién empezaba a tocar la batería, y no sabía nada. De pronto nos dimos cuenta de que empezaban a surgir canciones y que podía ser un proyecto más serio, entonces decidimos empezar la banda como un dúo. En cuanto al género, no fue premeditado. Hicimos una canción que iba por el género del surf rock llamada Costa este, y si bien hicimos otros más del estilo indie, decidimos mantener esa estética y esa línea, y fue lo que tratamos de hacer con el resto de las canciones de nuestro disco, Espanto Caribe.

—Tuvieron la posibilidad de irse a Estados Unidos, ¿cómo fue esa experiencia?, ¿qué esperan para este regreso?

—Fue un tour largo y lindo. Mucho mejor de lo que esperábamos. Nos habían dicho no esperen demasiado, y nos fuimos con esa idea, pero fue mucho mejor. Nos sorprendió la gente de habla hispana que nos iba a ver y que sabían las canciones. Este año volvemos y esperamos que nos vaya igual o mejor. Estamos contentas porque vamos a participar del Festival Ruido Fest en Chicago, que tiene un lineup muy bueno. Esperamos que nos vayan a ver los mismos que fueron el año pasado y se sume gente nueva.

—¿Cuáles son los próximos planes para la banda? 

—Acaba de salir Pista de fuego, queríamos hacer un disco larga duración pero terminamos en un EP. Pronto va a salir un video del primer corte de este trabajo. Tocamos en abril, no vamos a tocar hasta la gira, y después de volver el futuro es incierto. Tenemos varias canciones más, así que quizá las editemos en un EP a fines de este año o a principios del que viene, y queremos seguir tocando porque es lo que más nos gusta.

—¿Sienten que están rompiendo con el machismo histórico en el rock? 

—Siempre decíamos que no nos sentíamos discriminadas, pero con el paso del tiempo esa imagen se revirtió, y nos dimos cuenta de que sí, que hay cierta actitud machista, desde detalles mínimos, como estar levantando la batería o armándola, y te digan, Dejá, yo lo armo, o ¿Sabés cómo se arma? Todos los días la armo para ensayar y tengo fuerza para cargarla. También nos dimos cuenta de que en las cosas más importantes siempre se les presta más atención a las bandas de hombres y las integradas por chicas no están muy valoradas. Hay mujeres que tocan increíblemente y sin embargo están consideradas en un nivel inferior, cuando en realidad son 1.000 veces mejores que un hombre. Lamentablemente, le falta mucho al rock y al mundo para dejar de ser machista, pero es una lucha que se da despacito. Esperemos que se pueda equiparar.

—¿Qué opinan de la movida musical de La Plata?

—La ciudad de La Plata, más allá de la música, artísticamente siempre fue un semillero importante del que surgieron bandas increíbles y artistas geniales. La Plata tiene todo, hay un millón de bandas, hay público para todo, que se renueva constantemente. Lo difícil es salirse de la ciudad, poder expandirse, porque es un submundo en el que te vas desarrollando y no necesitás nada más. Lo bueno que pasó con nosotras es que pudimos crecer y expandirnos más allá de la ciudad. Creo que faltan más lugares preparados para tocar, porque muchos han cerrado. Pero La Plata tiene todo.

—¿Creen que ser independientes puede ayudar o complicar este proceso?

—Si bien los discos fueron editados por sellos, nos consideramos una banda dentro del DIY (hazlo tu mismo) porque hicimos nuestros propios videos, tapas y flyers. Lo que estaba a nuestro alcance lo hicimos. Los sellos te ayudan con la difusión del material, pero no hacen que te vaya mejor o peor. Eso depende de cada uno. Por eso la actitud proactiva salió de nosotras. No nos quedamos estancadas esperando que las cosas llegaran. Es lo mejor que puede hacer una banda, y cualquier persona en la vida, en general. Porque las cosas se hacen con compromiso y con esfuerzo. Eso es lo que hicimos durante este tiempo y por suerte nos resultó.