Tippi Hedren: “Hitchcock me atacó sexualmente”

La actriz fetiche del gran cineasta, con quien filmó dos películas, contó en su biografía que fue acosada y maltratada por su mentor 

Sin dudas Alfred Hitchcock es uno de los míticos directores que hicieron del séptimo arte, una de las industrias más prestigiosas y grandes del mundo. Siempre se comentó en Hollywood que el genio escondía una personalidad muy difícil de soportar para el resto de las personas. 

Pero la que fue aún más allá fue Tippi Hedren, madre de Melanie Griffith y abuela de Dakota Johnson, quien a los 31 años era una actriz de publicidad hasta que el realizador la vio, se deslumbró y le hizo un contrato de cinco años de duración, ofreciéndole clases de teatro con su mujer Alma Reville. Allí comenzó para ella una pesadilla personal que sufrió entre 1963 y 1964, durante los rodajes de Los pájaros y Marnie, las cintas que la lanzaron a la fama.

Según cuenta The New York Post que tuvo acceso al libro autobiográfico de Tippi antes de que llegue a las librerías, la intérprete confesó que Hitchcock era exageradamente posesivo con ella y que, durante la filmación de Los pájaros, llegó a prohibirle a los demás artistas tocarla o hablar con ella. Además, si la encontraba riendo junto a otro hombre en el estudio, se tornaba frío y malhumorado, y la miraba desafiante aunque estuviera en la otra punta del set. Por si fuera poco, rememoró que en la escena clásica de Los pájaros, el hombre detrás de cámaras le había prometido usar aves metálicas, y no cumplió. De hecho uno de los cuervos la picó y casi pierde un ojo.

En la serie producida y emitida por HBO, The girl, de 2012, se hicieron insinuaciones sobre la tortuosa relación que el cineasta mantenía con la joven actriz, pero sin adentrarse demasiado en los detalles tremendos que la artista contó en sus memorias que estarán a la venta a partir de hoy.

El intento de violación

La mujer de 86 años, relató el momento más difícil que le tocó vivir. Ya en el set de Marnie, que tuvo que hacer obligada por contrato, hizo instalar una puerta secreta que conectaba su oficina con el cambiador de Hedren. “Quiso ponerme las manos encima. Fue muy sexual y perverso. Cuánto más luchaba, más agresivo se ponía”, comentó sobre las veces que el hombre fallecido en 1980 entró de sorpresa al camarín e intentó tocarla. Luego de terminar ese contrato nunca más volvieron a trabajar juntos, aunque ella filmó más de cincuenta películas. “Nunca lo denuncié, porque en su momento abuso y acoso sexual eran términos que no existían”.