El San Juan de Dios procesó su primera válvula vascular

En el nosocomio se reciben las piezas cardiacas  y son preservadas para luego utilizarlas en pacientes con cardiopatías o en aquellos que requieran el reemplazo de arterias o venas por obstrucción

El Banco de Homoinjertos Cardiovasculares que funciona en el hospital provincial San Juan de Dios de La Plata, realizó el primer procesamiento de una válvula cardíaca, informó el director médico del Cucaiba, Gabriel Orlandi, quien estuvo presente y conversó con los profesionales. En dicho hospital de La Plata funciona el primer Banco público de Tejidos Cardiovasculares de la Provincia

El primer paso del proceso de preservación fue llevado a cabo en el quirófano del Banco que funciona bajo presurización, con un sistema de filtrado de aire y con estricto cumplimiento de normas quirúrgicas de asepsia para el trabajo con tejidos. Las válvulas cardiacas se encuentran en los conductos de salida de las cuatro cavidades del corazón, donde cumplen la función de impedir que la sangre fluya en una dirección inadecuada e irrigue todo el organismo.

En el nosocomio se reciben las piezas cardiacas ablacionadas de los donantes y se la preserva a 195 grados bajo cero para luego utilizarlas en pacientes con cardiopatías, endocaditis bacteriana o aquellos que requieran el reemplazo de arterias o venas por obstrucción. Un procedimiento de este tipo en un establecimiento privado tiene un costo superior a los 60 mil pesos.

Una vez separada la válvula de otros tejidos, fue sometida a un proceso de “rampa” de temperatura de 1 grado centígrado cada media hora desde los 37º C de la temperatura corporal hasta llegar a cerca de -130º C para luego almacenarla en una criopreservadora donde es mantenida a -195º C hasta su utilización. Ese descenso paulatino evita el deterioro de las células que se produciría con un enfriamiento brusco. Paralelamente a estos procesos, se envían muestras al laboratorio del hospital con el fin de analizarlas y determinar su aptitud para ser utilizadas y se asienta la nueva válvula en un registro donde se consigna su medida a la espera de un receptor.

El Banco cuenta también con una criopreservadora que mantiene su temperatura a -80º C y donde se almacenarán arterias, venas y pericardio, tejidos que no necesitan temperaturas tan bajas como las válvulas para su preservación.