La Plata y Alemania, unidas por el tango

Cientos de espectadores disfrutaron en el Pasaje Dardo Rocha de un evento de características internacionales que reunió en escena y al ritmo del 2x4 a la reconocida artista local Celia Millán y al germano Michael Ihnow

A noche, unos 1.500 platenses de todas las edades llenaron el hall central del Pasaje Dardo Rocha para presenciar el espectáculo gratuito Tango sin fronteras, que protagonizaron bailarines de nuestra ciudad junto con la Orquesta Municipal y la alemana denominada Misterio, integrada por músicos de la “Lausitzer Philharmonie”. 

La dirección del evento estuvo a cargo de la bailarina y coreógrafa platense Celia Millán, dueña de numerosos reconocimientos tanto en la Argentina como en el mundo. Junto con su Neoballet Argentino y la Compañía Estable de la Casa del Tango de La Plata, Millán obtuvo los primeros aplausos de la noche al interpretar Otoño Porteño, la soberbia composición de Astor Piazzolla, en cuyo repertorio descansaría buena parte del encuentro.

Violentango, Derecho viejo y Tanguera oficiarían luego como una especie de obertura hacia uno de los puntos más altos de la velada: la aparición en escena del gran bailarín alemán Michael Ihnow, de la Deutschen Oper Berlín, para danzar al ritmo de la sentida Chiquilín de Bachín, en el marco de una coreografía cargada de dramatismo y nostalgia. 

Tras Orlando Goñi, de Alfredo Gobbi, llegó acaso el momento más esperado: el reencuentro sobre tablas entre Ihnow y Millán, quienes sedujeron con una lastimosa versión de Zita, para más tarde confirmar su empatía con el público al ritmo de la sensible Oblivión y la potente Libertango.

También hubo ovación para Adriana Macchi, cantante argentina residente en Alemania, quien al promediar la gala puso voz a una sufrida versión de Malena, ejecutada por sus compañeros germanos de Misterio.

Quejas de bandoneón, Tanguango, Balada para un loco (magistralmente cantada por Macchi), Verano Porteño y Adiós Nonino marcarían el curso de “la noche más importante en la historia del tango de nuestra ciudad”, según había expresado el presidente de la Casa de Tango La Plata, Alberto Alba.

Luego de Allegro Tangagible, llegó Fuga y misterio para reunir en escena a los más de treinta artistas que nutrieron la jornada. Fue el cierre ideal para una noche que, sin dudas, permanecerá por largo tiempo en la retina y oídos de los tangueros.

Celia Millán, profeta en su tierra

“Poder presentarme en mi ciudad, estar con mis amigos, mi familia y el público es tocar el cielo con las manos”, dijo Cecilia Millán sobre la que consideró como “una propuesta original, creada especialmente para el público de La Plata y en la que se intercambió lo que cada uno de los artistas aprendió y generó en su tierra”.