La rehabilitación acuática cada vez más usada en La Plata

Los especialistas aseguran que acorta los tiempos de la recuperación, en referencia a la convencional y terrestre  

La rehabilitación kinesiológica acuática resulta de alta eficacia en la recuperación de lesiones de origen traumatológico, deportivo, reumático o neurológico, según destacaron desde el Colegio de Kinesiólogos de la Provincias de Buenos Aires (Cokiba) y es una tendencia cada vez más común en nuestra ciudad. De acuerdo a los estudios difundidos por el organismo, la rehabilitación acuática permite reducir hasta en un 30% el período de recuperación y tratamiento de dolencias tales como fracturas, desgarros musculares, roturas tendinosas, esguinces o distensiones ligamentarias, entre otras.

"Una sesión de 30 minutos en el agua, puede equivaler a una sesión de 45 minutos en tierra, lo cual la convierte en una excelente manera de obtener la misma carga de trabajo en menor tiempo", explicó la kinesióloga fisiatra, Nancy Mollar, especializada en rehabilitación acuática, creadora de la técnica RAH e integrante del Cokiba.

Lo importante y que marcan los especialistas es que no es necesario que el paciente sepa nadar para llevar adelante esta terapia, ya que la misma se realiza con la dirección y supervisión de un profesional kinesiólogo, siendo dicha terapia de incumbencia kinésica exclusiva. En el Colegio de Kinesiólogos de la provincia de Buenos Aires aseguran que en el área de la deportología se buscan utilizar técnicas que generen una recuperación más rápida y efectiva de las lesiones padecidas con menores costos en dichos tratamientos. 

"Una rotura de tendón rotuliano o tendón aquileano demanda -con tratamientos convencionales terrestres- mucho más tiempo de rehabilitación, que si se combinan ambas terapias (tanto acuática como terrestre). La rehabilitación acuática combinada con la rehabilitación convencional terrestre, posibilita al deportista una vuelta más temprana a la práctica deportiva y a su actividad profesional", explicó a Hoy Mollar.

“Con esta alternativa terapéutica, que se aprovecha el poder de flotabilidad y la disminución de la gravedad que confiere el agua para acelerar procesos de rehabilitación imposibles de realizar con medios convencionales", continuó la especialista.

De acuerdo a lo precisado, el entorno acuático permite fortalecer los músculos utilizando el agua como elemento de resistencia. Este medio brinda un ambiente propicio para la reeducación de músculos débiles, pudiendo controlar las fuerzas de compresión sobre las articulaciones solamente con variar el grado de inmersión.