Peligro cósmico: el planeta Tierra está desprotegido

La NASA dejó de financiar el único programa científico que localizaba elementos peligrosos del universo que podrían impactar en el planeta. Muchos científicos aseguran que la Tierra está sin protección

Mucho científicos del mundo advierten que la Tierra ha quedado desprotegida ante los potenciales impactos de cuerpos celestes luego de que hace algunas semanas, el único programa dedicado a la detección de cometas en el hemisferio sur haya perdido su financiación por parte de la NASA. Esto ha desatado una gran preocupación en el ambiente astronómico y es un tema que mantiene en vilo a los distintos profesionales abocados al estudio del universo. 

Este programa del observatorio australiano Siding Spring, que permitió descubrir el 3 de enero de 2013 el cometa que sobrevoló Marte a 56 kilómetros por segundo el pasado domingo era el único dedicado a la búsqueda activa de cometas, asteroides y meteoritos potencialmente peligrosos.

"Se trata de una preocupación real", afirmó Bradley Tucker, astrónomo en la Universidad Nacional Australiana y la Universidad de California, ya que "podría haber algo precipitándose hacia nosotros ahora mismo y no lo sabríamos".

Aquellos objetos que pasan a menos de 7,4 kilómetros de distancia de la Tierra o poseen un diámetro superior a los 150 metros se consideran asteroides potencialmente peligrosos. Actualmente, existen 1.500 astros identificados con estas características.

Gracias a este estudio australiano financiado por la NASA, responsable de identificar 475 asteroides y 82 cometas, ha sido posible descubrir más de 15 objetos espaciales. A pesar de todo, la investigación ha tenido que ser interrumpida, ya que la financiación o por parte de la NASA ha terminado, y ni el Gobierno australiano ni entidades privadas están interesadas en hacerlo. 

Tucker advierte que los gobiernos deben dejar de ver este programa como un simple proyecto académico, percibiéndolo más como un sistema de alerta temprana para minimizar el daño que pueda producir el impacto o roce de cara a evitar la pérdida de vidas humanas, subrayando que "no debería ser considerado como un problema aislado de un país, sino como un problema a nivel mundial".