¿Pocos pediatras en la región?

La suspensión de las guardias pediátricas en el Hospital Larraín de Berisso destapó una problemática: faltan especialistas para atender a los más chicos

"Si ves un pediatra, mandámelo”, ironizaba a Hoy el director del Hospital Larraín de Berisso, Mario Aued, al ser consultado sobre por qué no había nadie cubriendo las guardias en su nosocomio desde este lunes. Aued afirmó que, ante la renuncia de tres pediatras, se comunicó con los hospitales de la región y con las autoridades del Ministerio de Salud, pero no hubo caso: no encontraron especialistas para cubrir las cargas horarias.

El problema en el Larraín comenzó con el fallecimiento de una nena de 9 años por presunta mala praxis. El pediatra que la había atendido, denunciado penalmente, no apareció más en la institución. Este episodio fue el disparador de la renuncia de otros dos médicos, alegando que no se podía trabajar más en las condiciones actuales (léase sobrecarga de turnos, faltante de insumos, etc.). Ahora, quedaron sólo cinco médicos para siete días. No dieron las cuentas y nadie quiso tomar la posta. ¿No hay pediatras en la zona?

Un secreto a voces

La triste realidad sacó a la luz una situación que era bien conocida “puertas adentro” en el ambiente de salud, pero que en la comunidad estaba tapada: cada vez hay menos pediatras (sobre todo, que quieran cubrir guardias), y entre los motivos suena fuerte dos factores: los bajos salarios que paga la salud pública (y la consiguiente “huida” a las clínicas privadas) y las malas condiciones laborales, que los expone a cometer riesgos irreparables.

En diálogo con Hoy, Jorge Mazzone, presidente del Colegio de Médicos Distrito I de la Provincia de Buenos Aires, afirmó que el panorama es crítico. En este sentido, se refirió a un cóctel “malicioso” de factores que hacen mella en el estímulo de los aspirantes a pediatras, que mezcla tres ingredientes clave: “malas condiciones laborales, exceso de riesgo y  malos pagos”. Aceptar una guardia no es tentador para alguien que sabe que va a exponerse a la inseguridad de atender, muchas veces en soledad, a cientos de chicos, posibles partos y pacientes internados. Todo esto, sin una remuneración acorde a la responsabilidad del cargo. “Algo vamos a tener que hacer, porque la salud va a estar en jaque en los próximos años”, señaló Mazzone, quien agregó que esto ocurre también en otras ramas de medicina: “Esto es un rasgo más de este sistema de salud que está en crisis desde hace años”.

Por su parte, Pedro Gómez, referente de Cicop en el Hospital de Niños, subrayó a Hoy que existe una dramática faltante para ocupar vacantes en especialidades como neonatología, terapia intensiva o cirugía pediátrica. Esta carencia quedó evidenciada cuando abrió el Hospital El Cruce, y muchos profesionales se “pasaron” en busca de mejores remuneraciones que las magras recibidas en Provincia.

Este estado general de situación es sólo una muestra más de la crisis hospitalaria en nuestro país, donde los años de desidia empiezan a mostrar su peor cara: las consecuencias directas a la salud de los más chicos.

Las autoridades apuntan a la distribución

Más allá de los reclamos profesionales, para la cartera de salud bonaerense, según sus datos, La Plata es uno de los lugares con más pediatras per cápita de la provincia, con una tasa de uno cada 600 chicos de 0 a 15 años.

“Nuestro sistema de salud tiene un ámbito público, uno de seguridad social y uno privado”, afirmó a Hoy Alejandro Costa, subsecretario de planeamiento de Salud provincial. Y agregó: “La distribución, en el marco de estos distintos ámbitos, podría hacer que algunos lugares tengan la cantidad necesaria de pediatras y en otros puede faltar”. 

Sobre la problemática que denuncian en los Hospitales de la región, Costa señaló que “se está trabajando en los análisis cuantitativos: confirmar situaciones tanto de superávit como de déficit nos permite llevar adelante políticas que estimulen la migración del profesional”.