Una alumna platense “parará” contra las huelgas docentes

Tiene siete años y va a 2º grado. Con el aval de su padre, mañana se ausentará del colegio para protestar por los casi 10 días que lleva sin clases. Aseguran que otros estudiantes podrían adherirse

Mañana, Lucía Pérez Montero no ocupará su silla en la división D de 2º grado del Colegio Normal nº 1. Así, cumplirá su tercera jornada consecutiva sin asistir al aula. Pero esta vez su ausencia será voluntaria, a modo de protesta contra el paro docente que algunos gremios decretaron para ayer y hoy, y “en defensa de los casi 10 días” que, junto con sus compañeros, suma sin clases, según justificó su padre, Pablo Pérez.

En una carta dirigida a los directivos de la escuela, el integrante de la ONG Iniciativa Ciudadana explicó que, si bien comprende “perfectamente” el derecho a reclamar mejoras salariales, la situación actual “se ha desmadrado absolutamente”. Por eso, decidió apoyar a su hija con este “paro” de 24 horas, que podría ser el primero de una serie de medidas de fuerza a las que ya mostraron su adhesión otros padres, según le aseguró a nuestro medio el vecino de Tolosa.

Para Pérez, tanto alumnos como padres son “rehenes” del extenso conflicto y, aunque aclaró que no está en contra “ni de los docentes ni de los dirigentes sindicales”, aseveró que “ningún gremio puede digitar la educación de nuestros hijos”.

“No recuerdo que quienes hoy conducen los gremios a los que ustedes adhieren hayan alzado la voz durante los 90”, disparó el hombre en la misiva enviada a las autoridades de la institución educativa.

Mañana “no tendré que preocuparme para ver con quién dejo a Lucía durante el horario escolar. Ella estará conmigo, reflexionando sobre la importancia del aprendizaje y el conocimiento que, como acérrimo defensor de la escuela pública, creo que se debe defender en las aulas”, aseguró el dirigente barrial.

Mientras tanto, Pérez ya baraja alternativas para el caso de que las huelgas docentes se extiendan todavía más: “Lamentablemente, Lucía tendrá que aprender en forma autodidacta. Ella no volverá al aula hasta que (docentes y dirigentes) comprendan que no hay nada más reaccionario y servil a la miseria y la marginalidad que una escuela vacía”.

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