Melazo, contra las cuerdas

Suspendieron al “Oyarbide bonaerense” y buscan destituirlo

Por unanimidad, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios resolvió apartar provisoriamente de su cargo a César Melazo. Fue desplazado por tres meses a raíz de una causa iniciada por la jueza Marcela Garmendia. La destitución del letrado, cada vez más cerca. Ya sin fueros, deberá enfrentar procesos penales y podría terminar preso

César Ricardo Melazo, el “Norberto Oyarbide de la Justicia bonaerense”, fue suspendido ayer en forma provisoria por el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios bonaerenses en el marco del jury que se sigue en su contra, dejándolo de esa ma­nera al borde del juicio político.

La medida, que es por un plazo de 90 días y prorrogable por 90 más, fue dictada en forma unánime por todos los integrantes del jurado, quienes dejaron establecidas la gran cantidad de pruebas que pesan sobre el polémico magistrado en varias causas que se le siguen en su contra, a raíz de que habría realizado un mal manejo de las normas legales.

El fallo, que no es susceptible de apelación por parte del magistrado, está basado en el artículo 29 bis de la Ley 13.661 que dispone apartar al juez cuestionado si existieran elementos probatorios que hicieran verosímiles los hechos denunciados y si la naturaleza y gravedad de los mismos tornaran inadmisible la permanencia, en este caso de Melazo, en el ejercicio de su función.

Lo dispuesto es además sin perjuicio de las atribuciones de la Suprema Corte de Justicia de licenciar al magistrado por el tiempo que demande que el jurado se expida al respecto. El mismo está esperando que la Comisión Bicameral decida y, una vez que se expide, hay 30 días para hacer la acusación y luego el juez tiene 30 días para la defensa. Después de eso se decide la suspensión y, en caso de suceder eso, se le quita el 40% del sueldo y se lleva adelante el juicio político que podría terminar con la remoción.

Además, se aplicó a rajatabla lo que dice el artículo 34 de la mencionada ley, que establece que el jurado verificará la verosimilitud de los cargos, apreciando los elementos de juicio contenidos en el sumario, y los suministrados por la acusación y el acusado. Una vez que la acusación es admitida, se procede a la inmediata suspensión del acusado, lo cual finalmente sucedió ayer.

Alcances de la medida

La causa por la que fue alcanzado el “Oyarbide bonaerense” es la de la jueza Marcela Garmendia, quien lo había denunciado ante la Corte porque, mientras ella estaba de vacaciones, se metió en un expediente de su juzgado y sobreseyó definitivamente al secretario general del gremio de carga y descarga (de camiones), Daniel Gustavo Vila, imputado por la quema de un patrullero y otros incidentes en el Mercado Regional de La Plata.

Ahora el máximo tribunal tiene que nombrar a un juez subrogante del juzgado que antes conducía Melazo, que puede llegar a ser otro juez de Garantías o un conjuez. Además, el apartamiento, al ser una medida cautelar y no de fondo, no resuelve el tema central del proceso. 

Con una sola de las tres partes intervinientes en el caso, la Bicameral, la Procuración y los particulares (en este caso Garmendia), ya se puede enviar a juicio político a Melazo, con lo cual el proceso contra el magistrado estaría garantizado, más teniendo en cuenta el lapidario informe que hizo la renunciante procuradora María del Carmen Falbo sobre la labor del juez.

Todo el peso de la ley

Una vez marcado el casi seguro inicio de su proceso de juicio político, Melazo podría ser sometido a un proceso común y ordinario por parte de la Justicia y podría caerle encima todo el peso de la ley por su mal accionar al frente del Juzgado de Garantías platense a lo largo de los años, pudiendo terminar tras las rejas.

Ya sin fueros, el magistrado deberá dar respuestas a las denuncias que pesan en su contra por sus maniobras oscuras en diferentes causas, donde está acusado de haber favorecido a determinadas partes en perjuicio de otras, esquivando lo que decían los códigos procesales y aplicando para los mismos una realidad paralela que nada tenía que ver con lo que marca el Código Penal.

El comienzo del fin de la impunidad para los jueces corruptos, donde Melazo podría ser el primer magistrado en ser destituido, pero no el último. Al igual que Norberto Oyarbide, el juez ha gozado de las “mieles” durante la era K, principalmente de Aníbal “La Morsa” Fernández, ya que fue uno de los alfiles judiciales del exjefe de Gabinete durante su fallida campaña a gobernador bonaerense el año pasado. Además, coincidentemente con el malogrado magistrado y con el exfuncionario, ha sabido generar un alto nivel de rechazo social, que lo deja al borde del juicio político y a punto de irse por la puerta chica de la Justicia provincial. 

El paso a paso del jury

- 6 de julio: Se decidió dar inicio al jury contra el juez platense César Melazo.

- 18 de agosto: Comenzó a sesionar su causa en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados.

- 15 de septiembre: El magistrado, en un papelón, intentó ser parte del proceso y fue echado por el Tribunal.

- 6 de octubre: Declararon el fiscal Marcelo Romero y el abogado Marcelo Peña.

- 12 de octubre: En una nueva reunión del jury, avanzó la postura por la remoción del juez.

- 22 de noviembre: El jurado decidió apartar provisoriamente de su cargo a Melazo por 90 días.

“Que se haya dado el apartamiento preventivo de Melazo es muy fuerte”

Así se lo afirmó a diario Hoy el titular de la Secretaría Permanente de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios bonaerense, Ulises Giménez. Crecen las críticas al accionar del cuestionado magistrado.

La decisión de desplazar en forma preventiva al juez de Garantías platense César Melazo de su cargo desató inmediatamente un sinfín de repercusiones dentro del ámbito político y judicial, por la importancia y lo drástico de una medida que marca un principio que todavía tiene un final abierto.

El jurado ayer en su sesión que transcurrió en el Salón Dorado de la Cámara de Senadores de la Provincia de Buenos Aires dejó en claro que hay pruebas por “demás suficientes” para poner contra las cuerdas al cuestionado magistrado, abriendo paso a un proceso que tendrá más capítulos en las próximas semanas.

En diálogo con diario Hoy, el titular de la Secretaría Permanente de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios bonaerense, Ulises Giménez, señaló que “con este apartamiento el doctor Melazo debería dejar el juzgado. El proceso sigue en forma normal dentro de este apartamiento que es una cautelar dentro del proceso de remoción de magistrados”.

Para el letrado, “con una sola de las tres partes que diga que hay que enviar a juicio a Melazo, ya se lo puede enviar a juicio político. Con una sola es suficiente, porque es una acusación medular. Que se haya dado el apartamiento preventivo de Melazo y que se haya hecho lugar a eso es algo muy fuerte ya de por sí”.

Sin funciones

El jurado entendió que, como dice el artículo 29 bis de la Ley 13.661, existía la verosimilitud y gravedad de los hechos para apartar a Melazo de sus funciones. Específicamente, se trató la denuncia respecto al sobreseimiento que otorgó Melazo como juez subrogante en la feria, en una causa de la jueza Marcela Garmendia.

“La ley prevé solo una sanción que es la remoción, aunque no es técnicamente una sanción, es una me­dida que busca mantener la buena salud del Poder Judicial. Después del apartamiento de 90 días, se va a esperar que termine la prórroga de la Comisión Bicameral y ahí se le correrá traslado al magistrado para que se pueda defender y se verá cuál es su destino, donde el jurado verá si se suspende o no definitivamente hasta el probable juicio político”, resaltó Giménez.

Mientras tanto, Melazo no puede ejercer sus funciones y tampoco puede trabajar como abogado, por estar apartado proviso­riamente. Aunque no deja de ser juez, a los magistrados les está vedado el ejercicio profe­sional en estos casos.

“No merece permanecer en su cargo”

El senador provincial por Cambiemos, Juan Pablo Allan, señaló ayer que “el apartamiento preventivo dictado al juez César Melazo es un paso muy importante para empezar a cambiar la Justicia de la Provincia”.

Allan destacó el hecho de que “la resolución del jury haya salido por unanimidad de los 10 miembros presentes sobre la denuncia número SJ354/16 que realicé el 12 de agosto pasado”, y manifestó que “esto habla a las claras de que existe una vocación de cambio en la Justicia de la Provincia”.

En este sentido, el senador destacó que “funcionaron las instituciones; los abogados, legisladores y jueces del cuerpo tomaron juntos esta resolución que representa una verdadera oxigenación en el Poder Judicial”.

Finalmente, Allan destacó que “comienza a terminarse la complicidad entre la política y sectores de la Justicia que hasta ayer se pensaban impunes. Seguimos apuntando a la destitución de este juez porque no merece permanecer en su cargo”.

“La Justicia llega a los que se creían impunes”

Uno de los integrantes de la Comisión Bicameral de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios que debe decidir el futuro del juez César Melazo para destituirlo de forma permanente o no es el presidente del bloque de senadores provinciales del Frente Renovador, Jorge D’Onofrio.

En declaraciones a la prensa, el legislador manifestó: “Melazo es la imagen de la corrupción judicial que debemos desterrar en territorio bonaerense y nacional. Durante años ha tenido cobertura política y el sciolismo hizo lo imposible para que no se avance sobre su figura. De a poco la Justicia también llega a los que se creían impunes”. 

“Esta suspensión es un gran paso, pero todavía hay mucho por hacer por el bien de la Justicia y los ciudadanos”, recalcó D’Onofrio.

Las causas y las relaciones que lo tienen contra las cuerdas

- Cuatrerismo: Es investigado desde 2002 por extorsión y cohecho en un caso por el robo de 4.000 chanchos y 1.000 caballos.

- Abuso de poder: Fue denunciado por la jueza Marcela Garmendia de haber abusado de su poder como juez subrrogante. 

- Camino allanado: Se lo acusa de haber facilitado la fuga del barrabrava K, Marcelo Mallo, líder de Hinchadas Unidas Argentinas.

- Aliado a La Morsa: Durante la campaña de 2015, fue uno de los alfiles judiciales de Aníbal “La Morsa” Fernández en la Provincia.

- Maldita Policía: Su carrera como juez creció de la mano de la maldita Policía en territorio provincial, de la cual fue un ferviente defensor.

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