Carrió pide que se reabra la investigación por el robo en la casa de Massa

Se trata de la causa que se inició por presuntas irregularidades en los allanamientos en la vivienda del imputado. La legisladora reclamó que se impulse nuevamente el expediente ante la Procuración General de la Corte. Hay fiscales y policías en la mira

A pocos días de que Julio Novo  presentara su renuncia como fiscal general de San Isidro, en el marco de haber sido procesado por “encubrimiento agravado”, la legisladora Elisa Carrió presentó un escrito en la Procuración de la Corte para que se reabra la investigación por la presunta comisión de delitos en los allanamientos realizados el 21 de julio de 2013, en el marco de la pesquisa por el robo cometido en la casa del exintendente de Tigre, Sergio Massa.

Ambas situaciones se vinculan. Es que para Carrió, Novo y Massa son “muy amigos” y esa relación habría ocasionado favores del exfuncionario judicial al actual diputado y candidato por el espacio 1País.

En ese contexto, la fuerte sospecha es que en los allanamientos realizados en el domicilio del acusado de haber robado en la casa de Massa, Alcides Díaz Gorgonio, se registraron graves irregularidades y se presume que eso sucedió con el propósito de ocultar la importante suma de dinero incautada.

El pedido de la legisladora se sustenta en la denuncia del agente fiscal Washington Palacios, quien acusó a dos de sus pares por los delitos de falsedad ideológica, incumplimiento de los deberes de funcionario público y falsificación de instrumento público. Para Washington Palacios, en el informe donde se documentaron los allanamientos se desprende que el acta del registro domiciliario no fue firmada por los testigos Romualdo Díaz, Margarita Torres y Graciela Noemí Garate (esposa del malviviente).

Además, el comisario Gabriel Natiello, el testigo César Jaunarena y el imputado Alcides Díaz Gorgonio firmaron la primera y segunda hoja del acta de allanamientos de urgencia, pero no firmaron la tercera.

Las firmas de un sargento de la Bonaerense obrantes en la primera y segunda hoja del acta coinciden, pero la existente en la tercera no parece guardar identidad con las anteriores, y un peritaje caligráfico de parte determinó que se trataba de una imitación. Las irregularidades denunciadas incluyen también que en el allanamiento hecho en la casa de Ruta 197 en la localidad de Los Troncos no estuvo presente el testigo Jaunarena, cuando en el acta se consignó lo contrario

Varios de los testigos afirmaron ver en el procedimiento al secretario de Seguridad Ciudadana de Tigre, Diego Santillán, en actitud proactiva con el fiscal que encabezaba la causa, Mariano Magaz, pero sin embargo su presencia no fue documentada.

Otro dato: el testigo Jaunarena no presenció el momento en el que el fiscal encontró un arma con silenciador en uno de los objetivos, sin embargo en el acta se escribió que se revisó en presencia de él y se incautó la misma. Por estas anomalías fueron acusados por omitir investigar y hasta obstaculizar la causa los fiscales Magaz, de la UFI Rincón de Milberg, y Claudio Scapolán, representante del Ministerio Público de San Isidro.

Cabe destacar que Scapolán registra un pedido de juicio político en el que, entre otros hechos, se le atribuye haber omitido investigar los sucesos descriptos anteriormente.

En tanto, están en la mira, por presunta complicidad, varios agentes de la Policía Bonaerense.

Piden garantía de objetividad

Ante esta situación, la legisladora Carrió pidió que la investigación por las irregularidades en la pesquisa por el asalto a Massa las lleve adelante un fiscal ajeno al Departamento Judicial San Isidro, para garantizar objetividad.

Fuentes judiciales explicaron a diario Hoy que la causa se encuentra actualmente en la UFI nº 8 de San Martín, por así haberlo requerido su titular en el marco de la causa 15-0055797-16 en la cual se investiga a Scapolán, precisamente por una denuncia de Carrió.

Además se detalló que el último movimiento data de diciembre de 2015, cuando se resolvió confirmar el auto que deniega la Constitución como particular damnificado de dos abogados, en representación de César Emiliano Jaunarena.

Un testigo en peligro y una causa con final abierto

El asalto en la casa de Serio Massa sucedió en julio de 2013, cuando el ladrón se llevó plata, joyas y escapó, pero quedó filmado. Días después, fue detenido. Se trataba del exprefecto Alcides Díaz Gorgonio, quien hoy pasa sus días en un penal de San Martín. Al allanar su casa encontraron el botín, pero ese procedimiento generó muchas dudas.

Uno de los testigos, César Jaunarena, un joven jornalero, denunció que antes de registrar la vivienda de Florida al 1202, en Rincón de Milberg, ingresó Diego Santillán con un bolso vacío y se fue con el mismo repleto. Santillán era el secretario de seguridad ciudadana del municipio de Tigre.

Jaunarena dijo todo eso en la UFI nº1 de Pilar, entonces a cargo de Carlos Washington Palacios, donde agregó que el fiscal que investigaba el robo, Mariano Magaz, le indicó que no diga “que se encontró más dinero” porque “Massa no lo tenía declarado”.

El jornalero también denunció que él y su madre fueron amenazados de muerte.

Con el amparo del entonces fiscal general de San Isidro, Julio Novo, la Justicia denunció a Palacios. Lo acusaron de haber armado una causa para derribar la investigación del robo. Lo sometieron a un escandaloso jury y lo suspendieron.

Sin Novo y con el impulso de la diputada Elisa Carrió, esta historia podría tener otro final.