Cómo afectará el paro general

La huelga de mañana será la cuarta de carácter general durante el segundo gobierno de Cristina. El reclamo de los gremios es por el impuesto a las Ganancias. Advierten que si el Gobierno no da respuestas se viene otra medida similar de 36 horas

Mañana se desarrollará el cuarto paro de carácter general durante la gestión de la presidenta Cristina Kirchner. La convocatoria la arrancaron los gremios del transporte y se sumaron las CGT de Hugo Moyano y Luis Barrionuevo, y la CTA de Pablo Micheli. Se espera una adhesión de alto impacto.

La medida afectará el transporte (colectivos, trenes y subtes), los hospitales, los bancos públicos y privados y cajeros automáticos, las escuelas, la recolección de residuos, el expendio de combustibles, la administración pública y a la Justicia, entre otros servicios.

Un primer dato sobresaliente retrata con fidelidad el desgaste sufrido por la actual administración: todas las medidas de fuerza se llevaron adelante durante su segundo turno presidencial. Una importantísima suba de precios, la consecuente pérdida del poder adquisitivo de los salarios y la devaluación de la moneda, son una parte del fenómeno que explica el deterioro.

Ofuscados por la falta de respuestas desde el Gobierno, el secretario general de la CTA autónoma, Pablo Micheli, advirtió que los gremios podrían organizar un nuevo paro de 36 horas para dentro de dos semanas contra el impuesto a las Ganancias que afecta a los salarios más altos.

Micheli consideró que el Gobierno debería poner "un poco de sentido común" y convocar a una mesa de diálogo en el marco de un Consejo Económico y Social, como se da en otros países, para discutir "el problema del mínimo no imponible".

Desde la CGT, pronosticaron que el paro nacional de mañana marcará "una jornada histórica" con un reclamo "contra la precarización laboral, contra el impuesto al trabajo y por aumento de emergencia a jubilados".
En tanto, el Partido Obrero (PO) afirmó que la medida de fuerza "crece" en adhesiones y vaticinó que representará un quiebre en la CGT oficialista.

Para Micheli "van a parar casi todos los gremios, hasta los gremios oficialistas, como la UOM (Unión Obrera Metalúrgica), que dieron libertad de acción y eso significa que van a parar", por lo que consideró que "va a ser un paro de una contundencia tremenda".

El alcance de la medida de fuerza

Transporte: no circularán colectivos, trenes, subtes. Tampoco operarán los aviones. Será parcial en taxis

Educación: habrá amplia adhesión de seccionales del interior del país de gremios docentes. No habrá clases en escuelas técnicas y la actividad será parcial en las universidades

Bancos: sin atención al público ni carga de cajeros automáticos

Justicia: no habrá actividad

Hospitales públicos: habrá guardias mínimas para emergencias

Administración pública: actividad reducida o nula por el apoyo de gremios estatales

Precariedad laboral del 50 %

"Es el reclamo más mediático pero es uno de los tantos. Después tenés un salario mínimo congelado desde agosto, que para nosotros da 12.800 pesos y está en 4.700 pesos. Mirá la diferencia abismal que tenemos con los números que maneja el INDEC", se quejó el gremialista Micheli.

El jefe de la CTA opositora consideró que la huelga también es para que las negociaciones paritarias "no tengan tope" este 2015, dado que hay muchos sectores laborales en la economía con salarios deprimidos.

"Que el Gobierno no insista en poner un porcentaje menor a la inflación. Todos sabemos que fue superior al 24 por ciento (en 2014). Si volvemos a aceptar una pauta inferior a la inflación vamos a seguir perdiendo poder adquisitivo", alertó Micheli.

Y en ese sentido, señaló que, según datos manejados por  la CTA, "la precariedad laboral está llegando al 50 por ciento", por lo que los gremios están "preocupados por este tema" y también quieren exponerlo.

"Nosotros tenemos esperanza de que pueda reflexionar el Gobierno y poder discutirlo en algún momento. No va a ser una buena situación tener que agudizar el plan de acción", subrayó el sindicalista.