Muerte en el patrullero en La Plata

Crece el malestar en la fuerza

Familiares de los ocho efectivos demorados se manifestaron en el CPC de 21 y 527. Piden que se hagan cargo los jefes de los uniformados. Sospechan de una zona liberada y que el delincuente que perdió la vida actuaba con connivencia policial. Aguardan pericias claves

Crece el malestar en la Policía de la provincia de Buenos Aires por la decisión judicial de detener a ocho integrantes de la fuerza, acusados de haber tenido algún grado de participación en el procedimiento ocurrido el 26 de agosto pasado luego de un robo bajo la modalidad “entradera” en la casa de una médica en 2 entre 66 y 67, el que finalizó con el sujeto demorado muerto con un disparo en la cabeza.

Familiares de los agentes aprehendidos y dirigentes del Sindicato Policial de la provincia de Buenos Aires (SIPOBA) se manifestaron ayer en la sede del Comando de Prevención Comunitaria (CPC), ubicada en 21 y 527, para pedir explicaciones a las autoridades de esa dependencia, ya que consideran que fueron demorados en forma discrecional personal de escasa jerarquía, y que ningún jefe superior se hizo cargo de los errores del operativo.

La esposa de uno de los oficiales detenidos denunció que “la fiscal Betina Lacky,  sin tener los resultados de las pericias, ordenó encarcelar a agentes del CPC que nada tuvieron que ver con la muerte del delincuente”.

Desde el sindicato afirmaron que hay fuertes sospechas de que la víctima fatal, Juan Martín Yalert, de 35 años, un conocido malviviente, actuaba en lo que se llama una zona liberada. “Robaba para la Novena”, señaló un familiar de uno de los policías demorados.

En ese sentido, los manifestantes apuntaron como responsables de las maniobras irregulares al Jefe de la Departamental La Plata, Darío Cammerini y a las autoridades de la comisaría Novena.

Los familiares de los imputados por el crimen de Yalert esperan que los resultados de las pericias que realiza Gendarmería den luz a la investigación. De hecho, los allegados a los uniformados detenidos, sospechan que al delincuente lo balearon adrede para que no hable sobre sus vínculos ilegales con jefes de la Novena.

“El móvil policial en donde se advierte que Yalert está herido y con pérdida de sangre no fue secuestrado. Al otro día estaba en la calle recorriendo la jurisdicción cuando debía haber sido preservado para analizar pruebas claves para esclarecer el hecho”, explicó Luis, de SIPOBA.

También aguardan el resultado del dermatest de la mano de Yalert y de los policías acusados por el presunto homicidio. Y el informe de la autopsia, la que marcará con exactitud la trayectoria del proyectil.

La respuesta del Ministerio de Seguridad

Consultado por la grave denuncia de zonas liberadas y de delincuentes que roban con anuencia de comisarios, un vocero del Ministerio de Seguridad respondió que “nosotros actuamos de acuerdo a lo que disponga la fiscal y la justicia. Entendemos que al avanzar la pesquisa varios de los hoy detenidos van a ser liberados”.

“El ministro Alejandro Granados echó a más de 200 jefes policiales y en este caso no le va a temblar la mano para hacer lo mismo si las pruebas así lo indiquen”, agregó la fuente.

Otra de las quejas de los familiares de los policías aprehendidos es que el abogado defensor que les pusieron “pareciera que lo mandó el enemigo. Les dijo que uno se tiene que hacer cargo del crimen y los otros siete solo van a ser imputados por encubrimiento”.  

“No hablan de suicidio, dicen que ellos no fueron”

Por orden del Juez de Garantías, los ocho policías detenidos por la muerte de Juan Yalert continuarán detrás de las rejas, luego de que ayer terminaran de declarar los cinco efectivos que faltaban, señalaron fuentes judiciales.

La titular de la UFI 2, Betina Lacki, escuchó a los cinco agentes involucrados en el episodio que aún no habían pasado por fiscalía. Entre ellos estaban los dos uniformados que trasladaron a Yalert al Hospital San Martín cuando advirtieron que tenía un tiro en la cabeza.

Voceros judiciales relataron a este medio que, al igual que lo habían hecho sus tres compañeros en la testimonial que tuvieron el miércoles, “volvieron a insistir en la versión que ofrecieron desde el principio, desligándose de toda culpa”.

“Ellos no dicen exactamente que no se trató de un suicidio”, aseguraron desde tribunales. “Lo que cada uno hizo fue sacarse la responsabilidad. Declararon que la última vez que vieron a Yalert, estaba con vida y en buen estado. Aseguran que, hasta donde llegó su procedimiento, el demorado se encontraba bien”.

Terminado el proceso de la declaración, a partir de hoy la UFI 2 comenzará a analizar los peritajes que vayan llegando, que serán fundamentales para esclarecer qué pasó.

Los ocho policías se encuentran detenidos en la comisaría Octava (todos los hombres, que son cuatro) y en la Undécima las mujeres.

El lunes, reclaman en Plaza Moreno

“Los familiares de los ocho policías detenidos viven como gitanos. Se tuvieron que ir de sus casas por temor a represalias de los allegados al hombre que falleció”, explicó Nicolás Masi, secretario general de SIPOBA. En este marco de descontento, Masi adelantó que el lunes próximo habrá una concentración en Plaza Moreno a donde se convoca a allegados a los uniformados demorados. También esperan que arriben al reclamo familiares de la pareja de policías ultimada anteayer en La Matanza en un violento robo de auto.