El boleto educativo es ley: se profundiza la polémica

La Cámara de Diputados sancionó la norma que permitirá que alumnos de los niveles formales de la educación accedan al transporte público en forma gratuita. Docentes y auxiliares fueron excluidos del beneficio. Afiliados del SOEME reclamaron frente a la Legislatura

La cámara de Diputados bonaerense convirtió ayer en ley la creación del Boleto Estudiantil bonaerense, mediante el cual los alumnos de todos los niveles educativos de establecimientos públicos y privados con aporte estatal podrán viajar gratis en el transporte terrestre de corta, media y larga distancia y fluvial, pero dejó afuera de ese beneficio a los docentes y auxiliares de la educación, lo que profundizó la polémica.

La iniciativa había sido aprobada en el Senado con cambios, por lo que tuvo que volver a Diputados para su sanción definitiva y ayer la ley fue dictaminada por unanimidad.

Afuera de la Legislatura se manifestaron trabajadores afiliados al SOEME, los que mantenían la ilusión de ser incluidos en la norma. La secretaria adjunta del gremio, Susana Mariño, habló con Hoy y aseguró que “nos quedamos con pesar y bronca. Los trabajadores de la educación cobran sueldos bajos y si se lograba la gratuidad para movilizarse iba a mejorar la calidad de sus vidas. Pero vamos a continuar con este justo reclamo”.

Mariño destacó que “esta ley nos beneficia en forma indirecta ya que nuestros hijos estudiantes accederán al beneficio, pero nos da bronca el uso político que se le dio a este logro: los alumnos primarios y secundarios en la actualidad pagan boletos con valores que van entre 10 y 50 centavos, por lo que el impacto presupuestario se hará notorio solo con los universitarios. Tranquilamente podrían haber incorporado a los trabajadores de la educación. Faltó decisión política desde el oficialismo, ya que las empresas de transporte reciben importantes subsidios”.

Detalles de los beneficios

La Ley crea un régimen especial de boleto para "los usuarios del sistema de transporte provincial ferroviario, fluvial y de colectivo de pasajeros en sus servicios urbanos, suburbanos e interurbanos, destinados a los estudiantes de instituciones públicas de gestión estatal y de gestión privada con aportes del Estado, en todos los niveles, incluidos los de formación profesional y bachilleratos populares que tengan asiento en la provincia de Buenos Aires, para ser usados durante todo el año escolar".

Si bien la reglamentación determinará la cantidad de viajes autorizados por usuario, la iniciativa determina que "no podrán ser superiores a 50 viajes mensuales de sistema urbano e interurbano para primarios y secundarios, y 45 viajes mensuales para terciarios y/o universitarios". Mientras que para el sistema de larga distancia, dispone de un límite de 4 viajes anuales (ida y vuelta). 
 
Controvertida declaración

El diputado del Frente Renovador, Ricardo Jano,  se manifestó en contra de que el boleto alcance a docentes y no docentes, y sus dichos ofendieron a varios de los auxiliares docentes: "Festejo y celebro que se haya reformado el proyecto original, estuvo coherente en remitir el boleto a los estudiantes de todos los niveles educativos, los docentes deben tener este beneficio como trabajadores en blanco y el ámbito de discusión tiene que ser el de las paritarias".

Esta consideración fue fuertemente criticada por los trabajadores de la educación, quienes a través del SOEME presentarán en los próximos días una nueva propuesta a legisladores de la oposición.