El kirchnerismo y su oscuro panorama electoral
Luego de la derrota del pasado domingo en la Capital Federal, el oficialismo se replantea los pasos a seguir en la campaña electoral. El complicado presente de La Cámpora y el dilema de seguir o no a Daniel Scioli
La derrota del pasado domingo en la ciudad de Buenos Aires, donde su candidato Mariano Recalde salió cuarto, sumergió al kirchnerismo en un presente de pesado debate a su interior, más que nada sobre los pasos a seguir en la campaña presidencial que ya arrancó.
El avance de Mauricio Macri con sus candidatos en Mendoza y Santa Fe, más la confirmación de que el PRO es casi invencible en la Capital Federal, ha obligado a muchos de los miembros del gobierno nacional a poner las barbas en remojo y empezarse a plantear un cambio en su estrategia electoral de cara a las PASO nacionales del mes de agosto.
Es por eso que suena cada vez con más insistencia de que a nivel nacional haya sólo dos o a lo sumo tres fórmulas del Frente para la Victoria, una encabezada por Daniel Scioli, la otra por Florencio Randazzo y la tercera que sea un mix entre los demás candidatos que andan en danza, es decir, Sergio Urribarri, Jorge Taiana y Agustín Rossi, no más de 3 es la orden que dicen muchos que ha bajado directamente de la presidencia de la Nación.
Aníbal Fernández se ha hecho eco de esta afirmación y es por eso que relegó sus más que escasas ambiciones nacionales y se lanzaría a mediados de esta semana como candidato a gobernador bonaerense, donde ya suman más fórmulas y mucho revuelo al interior del oficialismo por su gran cantidad de candidatos pero escasa llegada a la gente.
Sólo el gobernador Daniel Scioli parece estar tranquilo, más que nada porque las encuestas siguen jugando de su lado, mostrándolo primero no sólo al interior del kirchnerismo, sino a nivel nacional, donde en todas las encuestas hoy está figurando en primer lugar a casi cinco puntos porcentuales de diferencia de Mauricio Macri y casi el doble que el ya demacrado aspirante Sergio Massa.
Es por eso que ya muchos que antes se declaraban como pertenecientes al modelo “nacional y popular” y renegaban de Scioli por su condición de ser un “hombre de los ‘90”, ya buscan cobijo en el exmotonauta, los casos más representativos son los del camporista Eduardo “Wado” De Pedro, Carlos Kunkel y Diana Conti, que ya trabajan abiertamente para que el mandatario bonaerense llegue a la Casa Rosada, olvidando sus anteriores diatribas en contra del gobernador.
Pero quien sin dudas peor la está pasando al interior del oficialismo, es La Cámpora, que ha caído derrotada con creces tanto en Mendoza donde apoyaba a Guillermo Carmona quien perdió claramente frente a Adolfo Bermejo, y en la Capital Federal su hombre, Mariano Recalde, cometió un papel mayúsculo al quedar en cuarto lugar con apenas el 12 por ciento de los votos.
La militancia rentada de La Cámpora tiene mucha llegada al poder presidencial, pero escasa representación en la sociedad, donde cada vez que se ha presentado a elecciones como cabeza de lista del Frente para la Victoria, ha caído derrotada con números por demás paupérrimos, lo que marca su pobre inserción en la ciudadanía.