El negociado con el agua que pagaremos todos

El gobierno bonaerense busca endeudarse en 120 millones de dólares para instrumentar un polémico proyecto de la gestión Scioli que encarecería aún más la tarifa de agua en la región

A yer se confirmó lo que el diario Hoy viene anticipando desde hace semanas: el gobierno bonaerense pretende continuar el negocio oscuro que se tejió durante la gestión de Daniel Scioli permitiendo que una controvertida empresa estatal israelí llamada Mekorot, en complicidad con la conducción del gremio Sosba, se quedé con parte del manejo del recurso hídrico en territorio bonaerense.

Eso no es todo: para que se concrete este negocio, que en principio se instrumentaría a través de la construcción de una planta potabilizadora en Ensenada cuyo proyecto es seriamente cuestionado por profesionales de carrera del Ministerio de Infraestructura, la provincia se endeudaría en el exterior. Concretamente,  el ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, ayer mantuvo un encuentro con miembros de la Corporación Andina de Fomento (CAF), con el objetivo de negociar la aprobación de un crédito por 120 millones de dólares que se destinarán al polémico proyecto. El encuentro tuvo lugar en la sede de la cartera económica y las reuniones se extenderán hasta hoy.

A la posible privatización del recurso hídrico, se suma la posibilidad de que se incrementen aún más las tarifas del agua: la Provincia estaría negociado comprarle a Mekorot medidores de alta sensibilidad que encarecería. Tal como informó Hoy, la empresa ABSA está puliendo los detalles para un aumento del 140% y desobedece un fallo de la Justicia, ratificado por la Suprema Corte bonaerense, que ordenó devolverle a los usuarios de la empresa estatal unos 1800 millones de pesos que fueron mal cobrados durante la administración Scioli.

El encuentro que se mantuvo ayer en el Ministerio de Economía no hizo más que reforzar las hipótesis de que el gobierno de Vidal buscaría continuar con la adjudicación que hizo el gobierno de Daniel Scioli a favor de una unión transitorias de empresas integrada por Mekorot, la firma 5 de septiembre que encabeza el secretario general del Sosba, Julio Castro, la firma Mako que integra el abogado platense Marcelo Salinas (ex marido de María Eugenia Ritó y socio del Sosba en el control operativo de Absa) y la empresa Eleprint, cuyo vicepresidente es Pascual Caiella, actual vicepresidente de Estudiantes de La Plata. En ese sentido, tal como lo viene informando Hoy, representantes de Mekorot se habría reunido en secreto con la mismísima gobernadora Vidal.

La continuidad de este negocio habría sido uno de los factores que llevaron a que Castro, que también preside la Federación de Gremios Estatales, haya avalado la irrisoria oferta salarial del 12% que intentó imponer el gobierno bonaerense en momentos en que la inflación anual no baja del 40%. Producto de ese pacto, el titular del Sosba mantiene un sospechoso silencio sobre la reapertura de paritarias ordenada por la Justicia.

“Insistimos que antes de hacer esta obra de la planta potabilizadora  hay que reparar la red de distribución para disminuir las pérdidas de agua y optimizar el servicio existente. A su vez, el servicio de Mekorot es muy caro y no se adapta a las necesidades de nuestro país y las exigencias en términos de calidad de agua que planteó la licitación llevada  a cabo por el gobierno de Scioli están por debajo de los estándares que determina el Código Alimentario. Es decir, podría ocasionar serios daños a la salud. Dado el tiempo transcurrido, se debería llamar a otra licitación”, dijo a Hoy el ingeniero Adolfo Ruiz, delegado general de ATE en la Dirección de Hidráulica de la Provincia.  La red, que tiene caños de plomo de más de 100 años en distintos puntos de la región, es un aspecto medular que según los expertos justifica el por qué una obra como una planta potabilizadora carece de sentido hasta tanto no se renueve el sistema de distribución. En otras palabras, es imposible mejorar la potabilización del agua si el líquido sigue atravesando cañerías derruidas.