Empresario y barrabravas, presos por doble crimen narco

Ya sin la protección judicial de la procuradora María del Carmen Falbo, y tras ocho años de impunidad, la Justicia federal avanza con la investigación de los asesinatos de dos colombianos en el Unicenter. Detuvieron a un farmacéutico socio de Ibar Pérez Corradi y dos presuntos sicarios

Todo parece indicar que aparecieron las piezas presuntamente escondidas durante casi ocho años por la procuradora de la Corte bonaerense, María del Carmen Falbo, y el exfiscal general de San Isidro, Julio Novo. Ahora, el rompecabezas que vincula narcotráfico internacional con sicarios barrabravas apañados por dirigentes políticos se ensambla a la perfección.

El Triple Crimen de General Rodríguez de agosto de 2008, la triple fuga de los condenados por esa masacre en diciembre de 2015, el doble crimen de colombianos en el Unicenter de Martínez en julio de 2008 y la condena de los hermanos Juliá en España por traficar una tonelada de cocaína en un avión, tienen un hilo conductor que recién la Justica toma en serio cuando en marzo último pasó a la órbita federal, lo que habla a las claras de una sospechosa connivencia judicial del fuero bonaerense, denunciada por varios de los fiscales de la Provincia, entre ellos Luis Angelini.

Fue clave el descubrimiento de que una de las pistolas secuestradas en enero pasado al exlíder de Hinchadas Argentinas, Marcelo Mallo, un dirigente K de Quilmes, en el marco de la investigación por la fuga de los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schilacci de la cárcel de General Alvear, fue la utilizada en el doble crimen de Unicenter, donde fueron ultimados a tiros Jorge Alexander Gartner y Héctor Edilson Duque Caballos, ambos de 35 años, este último con antecedentes por traficante de drogas en su país natal, Colombia. 

Ahora, por esa causa, la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado ordenó las detenciones de Martín López Magallanes, un empresario farmacéutico que tendría fuertes vínculos con Sebastián Forza, una de las víctimas del Triple Crimen y con Ibar Pérez Corradi, preso en Paraguay y quien está en la mira por ser el autor intelectual de los tres asesinatos de Forza, Leopoldo Bina y Damián Ferrón.

¿Un protegido de Angelici?

Arroyo Salgado también pidió el encarcelamiento de un barrabrava de Boca Juniors, Richards “El Uruguayo” Laluz Fernández, quien, se dice, es un protegido del presidente de ese club, Daniel Angelici.

De hecho, Angelici fue el último presidente en mandar la lista de barrabravas a la AFA, donde figuraban Rafael Di Zeo y su lugarteniente, que en esos momentos era Laluz Fernández.

Asimismo la jueza pidió la detención de los presuntos sicarios de Gartner y Duque Caballos, Jorge Moreira y Víctor Hugo Ovejero Olmedo, éste último es el único de los cuatro que se mantiene en calidad de prófugo. Las detenciones de López Magallanes, Laluz Fernández y Moreira se concretaron anteanoche.

Desde un comienzo, los mismos cuatro imputados fueron investigados por los fiscales de San Isidro que intervinieron en la causa, Diego Grau y Luis Angelini, quienes trabajaron con la hipótesis de que el doble crimen estaba vinculado al narcotráfico y que los sicarios eran barrabravas de Boca. Sin embargo, entre 2008 y marzo pasado esa pesquisa nunca avanzó por “los palos en la rueda” que habrían puesto Novo y Falbo.

De acuerdo con el relato de las fuentes consultadas, la presunción de los pesquisas es que López Magallanes pudo tener motivos para encomendarle los homicidios de los colombianos al Uruguayo, y que este los organizó con Moreira y Ovejero Olmedo.

La relación con el puntero K, Marcelo Mallo

El fiscal de Brandsen, Mariano Sibuet, acusó el viernes pasado por “encubrimiento” y pidió la detención del exbarra de Quilmes y dirigente kirchnerista, Marcelo Mallo, y de otro hombre llamado 

Leandro Giso, luego de que se determinara que un arma hallada en poder del primero y que es del segundo, fue usada para asesinar a los colombianos en el Unicenter de Martínez.

Sin embargo, ni Mallo ni Giso se encontraban en los domicilios en los que la Policía Bonaerense fue a detenerlos y ayer eran buscados intensamente por las autoridades.

El arma, una pistola Tanfoglio calibre 40, había sido secuestrada en la casa de Mallo en enero pasado por Sibuet, en el marco de la búsqueda de los hermanos Martín (42) y 

Cristian Lanatta (44) y Víctor Schillaci (35), los condenados por el Triple Crimen de General Rodríguez que se habían fugado del penal de General Alvear el 27 de diciembre de 2015.

La viuda de Forza complicó a Aníbal Fernández

Solange Bellone, esposa de Sebastián Forza, una de las víctimas del Triple Crimen de General Rodríguez, declaró nuevamente ante la Justicia y aseguró que el encuentro que su pareja dijo tener con una persona “importante” apodada “La Morsa” en búsqueda de protección “podía” haber sido Aníbal Fernández.

“Cuando lo empiezan a mencionar en los medios como La Morsa yo ahí tomo conocimiento de que podía ser la persona que vio a Sebastián”, dijo Bellone al declarar días atrás ante la jueza federal María Servini de Cubría, quien investiga el tráfico ilegal de efedrina así como el Triple Crimen de General Rodríguez.

Bellone recordó que fue el condenado Martín 

Lanatta quien “llevó a Sebastián a una oficina donde había un tipo importante apodado La Morsa y que había una chica rubia armada y que ahí entregó 200.000 dólares”.

Además, sostuvimos con pruebas contundentes cómo diferentes funcionarios que rodeaban a Echegaray en la AFIP estaban conectados con casos de narcotráfico y lavado de dinero.