Escándalo Grassi: intervienen la fundación “Felices los niños”

Tras las denuncias por el manejo irregular de fondos, el gobernador Scioli dispuso la medida de control sobre el establecimiento dirigido por el “sátiro de la sotana”. El director de la Unidad 49 fue removido para “transparentar” la investigación

A escasos minutos para que  finalice el domingo (27), la prensa televisiva daba a conocer una investigación que definiría la agenda noticiosa semanal, al tiempo que desataría un escándalo de gran envergadura. El informe periodístico daba a conocer un oscuro entramado, fundamentado a partir de varias pruebas, en el que se constataba que el cura Cesar Grassi, condenado por abuso de menores y detenido en la Unidad Penal 41 de Campana, giraba donaciones asignadas a la fundación “Felices los Niños” hacia el establecimiento carcelario. De este modo, el religioso lograba beneficios y privilegios respecto al resto de los reclusos. 

Las repercusiones políticas no se hicieron esperar. La primera decisión fue tomada por el gobernador Daniel Scioli, quien decretó  la intervención de la Fundación en cuestión, con el objetivo de aclarar la situación y  garantizar el trabajo coordinado con el director de Hogares del establecimiento, Juan Manuel Casolati (ver recuadro). La disposición gubernamental fue resuelta horas después del allanamiento llevado a cabo en la casa del sacerdote. La justicia intenta dar con nuevas pruebas, que sumadas a las cámaras ocultas y registros expuestos el domingo, permitirían reconstruir la red operativa del ilícito, de la cual habrían participado miembros de la fundación en cuestión e integrantes de la Unidad 41. 

Desde la provincia, también se resolvió que el secretario de Niñez y Adolescencia, Pablo Navarro, la titular del Servicio Penitenciario (SPB), Florencia Piermarini y el subsecretario de Justicia, César Albarracín,  se presentaran ayer  en la sede de la fundación en Hurlingham. Allí se entrevistaron con las autoridades del lugar y los chicos que allí se alojan. En ese marco, Navarro explicó que si bien la Fundación Felices los Niños “no tiene convenio con la provincia de Buenos Aires” desde diciembre pasado trabajaba “un equipo interdisciplinario con Casolatti con el objetivo de que los chicos estuvieran mejor”. Además agregó que la gestión bonaerense “financia alrededor de 200 hogares convivenciales”.

Por su parte, y a través de un comunicado de prensa, la jefa del SPB anunció  la separación preventiva del titular de la Unidad 41 de Campana, Raúl Garnica.

Según aseguraron desde la institución bonaerense “la medida fue adoptada con el objetivo de garantizar la transparencia y la exhaustiva investigación en el marco del sumario iniciado en el penal”.

Las comodidades carcelarias

El giro de donaciones a la unidad carcelaria, le permitía a Grassi disponer de una serie de comodidades y privilegios que lo diferenciaba del resto de la población carcelaria. Por ejemplo, se pudo constatar que más allá de pasar gran parte del día en una de las oficinas del depósito del establecimiento, el cura poseía en su celda un televisor LED de 21 pulgadas con conexión satelital. Asimismo, y según trascendió, en la última requisa detectaron la existencia de cinco celulares con los que se comunicaba con el exterior.

Casolati habló del enriquecimiento de “un grupo de leales” al cura 

El director de Hogares de la fundación Felices los Niños y denunciante de desvío de donaciones en beneficio del cura Grassi, Juan Manuel Casolati, afirmó ayer que existe "un grupo de leales" del cura en la institución que también se enriqueció con la presunta irregularidad. 

"Hubo complicidad absoluta de un grupo de leales que tiene Grassi allí, que se ha ido enriqueciendo en estos años y ha ido utilizando la organización en beneficio propio, pero a pedido de Grassi; son sus manos ejecutoras de la cantidad de ilícitos que comete (desde el penal de Campana)", dijo Casolati. 

Por último, señaló que Grassi “se enriqueció y utilizó a los chicos como herramientas”. 

Stolbizer pidió relevar a “toda la cúpula del servicio penitenciario”

Luego de que el escándalo “Grassi” tomara estado público, legisladores de la oposición pidieron al ejecutivo bonaerense que lleve a cabo una remoción de los funcionarios comprometidos del sistema carcelario provincial. En ese sentido, la diputada nacional por el Frente Amplio Progresista (FAP), Margarita Stolbizer, le reclamó ayer al gobernador Scioli que releve a "toda la cúpula del servicio penitenciario bonaerense”.  

 "Los legisladores provinciales del Partido GEN van a pedir de manera urgente la interpelación de todos los funcionarios responsables y exigimos al gobernador Scioli que, sin perjuicio de la investigación que se va a iniciar, se aparte de los cargos a toda la cúpula del servicio penitenciario, así como también a quienes debían supervisar la prestación de las becas y el alojamiento de los menores en el hogar de la fundación del cura Grassi", enfatizó la referente del espacio progresista.