Gestos diferenciadores de Scioli

El tsunami político que significó para el gobierno la muerte del fiscal Alberto Nisman, lleva al gobernador Daniel Scioli a desmarcarse del rumbo oficial. Señales de distanciamiento con el kirchnerismo duro

El gran comediante mexicano Roberto Gómez Bolaños, en su personaje El Chapulín Colorado, solía decir “¿Y ahora quién podrá ayudarme?”, y esa pregunta se la vienen realizando gran variedad de referentes del peronismo, que ven que luego del fallecimiento del fiscal Alberto Nisman, se encuentran descolocados ante una realidad que los abruma.

Muestra de esto fue la bochornosa reunión la semana pasada en la sede del PJ en donde la plana mayor del partido salió a apoyar a la Jefa de Estado denunciando un supuesto “complot” de sectores de inteligencia, grupos económicos, jueces y medios para desestabilizar al Gobierno.

Tal como remarcó Hoy en su edición del viernes pasado, una de las personas a las que se vio más incómodas en dicho cónclave, fue al mandatario bonaerense Daniel Scioli, a quien estas acciones ordenadas desde Olivos lo perjudican en su intención de llegar a la Casa Rosada.

Es así que en las últimas horas el gobernador ha salido a marcar territorio al diferenciarse claramente de los hechos y acciones del Ejecutivo. Prueba de esto es la reunión que mantuvo el fin de semana en Mar del Plata con el embajador de Estados Unidos, Noah Mamet, en momentos en que altos miembros del kirchnerismo acusan al país del norte de establecer vínculos con Nisman a través de su aparato de inteligencia para involucrar al gobierno nacional en una denuncia por encubrimiento al atentado a la AMIA.

Más allá de que la reunión fue protocolar y nada se charló sobre política, sino sobre cómo mejorar las relaciones entre ambos países, en la Casa Rosada estalló el alerta de que esta sea una de las acciones de Scioli para desmarcarse del accionar K de cara a las elecciones del mes de octubre.

No dejó de sorprender para los analistas políticos, que uno de los ministros con más bajo perfil del gabinete sciolista, como lo es el titular de Asuntos Agrarios, Alejandro “Topo” Rodríguez, saliera ayer a pegarle fuertemente al PJ y su declaración del pasado jueves.

El ministro bonaerense aseveró que le llamó la atención “la ausencia de alguna reflexión crítica sobre la inclinación de algunos falsos personeros de la política que se ocupan de estar bien con Estados o con organizaciones que patrocinan el terrorismo".

Todo esto lleva a pensar que Scioli está abriendo las puertas a una confrontación de bajo calibre con lo más duro del kirchnerismo, de allí que salga a hablar Rodríguez, una persona que claramente no haría declaraciones públicas de no tener el guiño anterior del gobernador.

Son constantes las voces alrededor del mandatario provincial que hablan que el kirchnerismo con acciones como las del documento del PJ, lo único que está haciendo es entorpecer el camino a octubre, logrando en todo caso una victoria opositora y que ni siquiera el candidato que salga de la interna del FpV logre entrar a una segunda vuelta electoral.

Estos pequeños gestos diferenciadores llevan a que la campaña dentro del oficialismo adquiera otra magnitud, ya que hasta el momento Scioli sólo había recibido agresiones por parte de sus rivales internos y no había salido a contestar ninguno de los agravios. Ahora, a partir de estas discordias se abre un nuevo panorama al interior del peronismo que pueda hacer saltar su estabilidad interna en mil pedazos.