Invasión K: jueces federales presionan a la Corte Suprema

Magistrados de todas las cámaras federales le pidieron al presidente del Máximo Tribunal argentino, Ricardo Lorenzetti, que ni bien finalice la feria judicial dictamine la inconstitucionalidad de la nueva ley de subrogancias

Un amplio sector del poder judicial argentino está decidido a poner freno al embate del kirchnerismo, el que además de perseguir a magistrados que no fallan a su favor (Luis Cabral, Claudio Bonadio, José María Campagnoli y Carlos Fayt, entre otros), logró imponer una nueva ley de subrogancias, es decir, la norma que dispone las suplencias de jueces en la que se permite designar a simples abogados o secretarios de juzgados como titulares de tribunales.

Esta nueva ley de subrogancias da poder al Consejo de la Magistratura de la Nación, con mayoría oficialista, para que pueda nombrar conjueces en juzgados vacantes violando los "principios constitucionales de juez natural, imparcialidad e independencia judicial".

La inconstitucionalidad de la nueva norma ya la pidió el 2 de julio pasado el juez en lo Civil, Comercial y Contencioso Administrativo Federal 4 de La Plata, Alberto Osvaldo Recondo, cuando solicitó la separación de Laureano Durán como titular del Juzgado Federal Nº 1 de La Plata, por considerar que no reúne las características mínimas para ocupar ese cargo, un puesto clave con competencia electoral en el mayor distrito del país.

La Asociación de Magistrados y el Colegio de Abogados porteño, entre otras entidades, también demandaron que se declare inconstitucional la nueva norma de subrogancias.

Todas estas solicitudes fueron apeladas en instancias de alzadas y ahora deberá ser la Corte Suprema de Justicia la que defina el destino de esta norma clave para el futuro de Cristina Kirchner y varios de sus funcionarios, imputados en causas por corrupción.

Un pedido nacional

En las últimas horas, los jueces federales de todo el país están intensificando los contactos para coordinar una presión común sobre el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, para que una vez terminada la feria judicial de invierno, reúna al máximo tribunal y dictamine la inconstitucionalidad de la nueva ley de subrrogancias.

Son más de diez los amparos presentados por organizaciones de jueces, abogados y entidades no gubernamentales, contra esta ley que el kirchnerismo empezó a instrumentar con la polémica separación de la Cámara de Casación del juez Luis Cabral, que se disponía a decretar la inconstitucionalidad del entendimiento con Irán.

La ley de subrogancias que se aprobó este año y entró en vigencia el pasado 18 de junio habilita al kirchnerismo a nombrar jueces suplentes con su mayoría de siete votos en el Consejo de la Magistratura, de una lista de conjueces compuesta por abogados de la matrícula y de secretarios letrados, en su gran mayoría cercanos al Gobierno. Se trata de la última maniobra urdida por el candidato a vicepresidente Carlos Zannini y ejecutada por el camporista viceministro de Justicia, Julián Alvarez, para colonizar juzgados considerados “claves” porque tratan causas de corrupción incómodas para el kirchnerismo.