Investigarán a la ex de Boudou por la compra de otro departamento
La periodista Agustina Kämpfer, ex pareja del vicepresidente Amado Boudou, deberá explicarle al juez que la investiga en una causa por enriquecimiento ilícito de dónde sacó los u$s215.000 que declaró le costó su nueva casa, un departamento de 174 metros cuadrados con cochera y terraza en pleno barrio de Recoleta.
La ex de Boudou se presentó el martes 2 de junio al mediodía en la casa central del Banco Nación para concretar una transacción inmobiliaria. Kämpfer vendió su departamento de 106 metros cuadrados en la calle Bonpland al 1.200 y compró otro sobre Rodríguez Peña y Arenales.
Según el Código de oferta de transferencia de inmuebles, uno de los formularios exigidos por la AFIP a la hora de vender un inmueble cuyo valor este por encima de los $600 mil, que declaró Kämpfer su departamento de Palermo logró venderlo en u$s172 mil, 43,3% más de lo que declaró haberlo pagado cuando lo compró en octubre de 2010.
Pero no fue el precio de venta de este departamento de dos pisos con terraza lo que llama la atención, sino de dónde sacó los dólares en efectivo para pagar su nuevo departamento. Es que el de Bonpland se lo pagaron una parte en Cedines, u$s80.000, y otra en pesos: 792 mil. Para que cierren los números, Kämpfer debería haber comprado dólares a precio oficial, 8,60. Eso, sin contar los gastos de comisión inmobiliaria, impuestos y escribano que suman 10% del total.
Sin embargo, las cuentas siguen sin cerrar. En Recoleta, el metro cuadrado promedio ronda u$s2.600, por lo que un departamento como el que la ex de Boudou acaba de comprar, un contrafrente con dos habitaciones, unos 80 metros cuadrados de patio, una baulera y una cochera, no se consigue por menos de u$s350 mil.
La periodista de Intratables y participante de "Bailando por un sueño" es investigada como presunta testaferro del vicepresidente de la Nación en la causa en la que lo investigan por enriquecimiento ilícito. En los casos de enriquecimiento se invierte la carga de la prueba, esto quiere decir que no es ya la Justicia la que tiene que demostrar que el acusado es culpable, sino que es éste el que debe explicar cómo forjó su patrimonio.