El policía imputado por el robo a Garro

La Justicia va a indagar a Masana por enriquecimiento ilícito

El imputado es un subteniente de la Policía Bonaerense, detenido por el robo en la casa del intendente Julio Garro. La UFI nº 7 lo tiene en la mira por el supuesto manejo corrupto de las horas Polad en la comisaría Primera

Patricio Masana es un subteniente de la Policía Bonaerense que está a punto de ser exonerado de la fuerza por Asuntos Internos. Se encuentra detenido en una cárcel de Olmos, acusado de haber participado del robo a la familia del intendente Julio Garro, ocurrido el 2 de marzo del año pasado, en el country Grand Bell, ubicado en la Capital provincial.

Además, el subteniente está acusado por el presunto delito de enriquecimiento ilícito, por lo que en las próximas semanas va a ser llamado a indagatoria. A partir de una investigación llevada adelante por Virgina Bravo, fiscal de la UFI nº 7 que lleva la causa, se habrían confirmado serias inconsistencias entre sus ingresos y su nivel de vida, informaron fuentes judiciales.

Tras el asalto ocurrido en la casa del intendente, se ordenó un allanamiento en el domicilio de Masana, donde personal de la DDI La Plata secuestró planillas de horas Polad (Policía Adicional) y una importante cantidad de dinero en la caja fuerte. Además, el agente percibía un salario mensual aproximado de 18.000 pesos y pagaba un alquiler de 30.000 pesos por una casa en el country Grand Bell y expensas por 8.000 pesos. Esos indicios llamaron poderosamente la atención a la fiscal Bravo y, a poco de arrancar la investigación, fueron relevados los jefes de Masana en la comisaría Primera de La Plata: su titular, Marcelo Cifuentes, el segundo, Carlos Arias, y el jefe de Administración de esa seccional, Fabio Walter Suárez Perri.

Hasta el momento, se pudo comprobar que el ahora detenido por el robo en la casa de Garro se encargaba de manejar cifras millonarias mensuales con las Polad. Se estima que la comisaría Primera tenía a su cargo 42 objetivos fijos para custodiar con 560 efectivos las 24 horas.  

Un vocero judicial le dijo a diario Hoy que “los peritos contables confirmaron que con la capacidad de ahorro de Masana jamás podría tener recursos para mantener el nivel de vida que tenía”. Los instructores judiciales pudieron confirmar que Masana era de viajar de manera periódica al exterior, a países como Estados Unidos y España. También detectaron que entre las planillas de Polad secuestradas en la casa del agente policial figuraban nombres de personas que ni siquiera serían efectivos de la fuerza.

En tanto, se continúa con el análisis de datos enviados por bancos, por la AFIP sobre embarcaciones, y por el Tribunal de Cuentas. Todo parece indicar que Masana formó una sociedad con quien era su pareja y esa entidad también está en la mira.

Presuntas estafas millonarias

Se presume que el subteniente era parte de una organización delictiva en la que se defraudaba al Estado. Con la connivencia de autoridades policiales, ministeriales y aún desde la Dirección General de Administración de la Gobernación, se manejaron de manera irregular millones de pesos sin que se ofreciera ningún tipo de servicio de seguridad.

“Investigamos la operatoria. Aparentemente se formalizaba con un pedido de custodias fijas a algún organismo estatal y la designación de fondos. Luego el dinero se giraba pero el servicio no se cumplía y la plata quedaba en manos de los cómplices de la maniobra”, explicó uno de los investigadores.

La Auditoría General de Asuntos Internos espera el dictamen de la Asesoría General de Gobierno para finalizar el sumario en el que exonerarán al subteniente Patricio Masana.

¿Comercializaba drogas en fiestas electrónicas?

Patricio Masana, de 35 años, es también sospechoso de haber comercializado drogas sintéticas en fiestas electrónicas, ya que en la casa que alquilaba secuestraron 187 pastillas de metanfetaminas y 62 cristales de cocaína, una cifra elevada para ser destinada a consumo personal.

Los investigadores saben que el nivel de vida del policía sospechado no se condice con el de un efectivo de bajo rango, y están convencidos que sus jefes “lo protegían”. Masana tenía una camioneta Mercedes Benz, un VW Scirocco y un Citroën C3. En su entorno aseguran que durante el año 2015 habría viajado a una isla del Caribe, que planeaba volar a Barcelona y que a sus amigos les decía que tenía dos departamentos en Miami. 

Un preso que suma reveses judiciales

El juez de Garantías de la ciudad de La Plata, Guillermo Atencio, ya había rechazado en su momento el pedido de excarcelación que había formulado la defensa de Patricio Masana por el robo a la familia del intendente Julio Garro, por considerar que estando en libertad podría llegar a entorpecer la investigación y por el creciente “riesgo de fuga” que se presume por la pena en expectativa.

Masana está detenido desde el 2 de marzo de 2016, cuando fue alojado en uno de los sectores de la Alcaidía de Olmos durante dos meses, y luego fue trasladado a la Unidad 25 de esa misma localidad.

En el planteo de la defensa se le pidió a Atencio que tuviera en cuenta que a lo largo de toda su trayectoria Masana “carece de antecedentes penales y ha colaborado activamente con la investigación”, pues sería “infundado afirmar que en caso de ser declarado culpable” pueda “llegar a corresponderle la aplicación de una pena de cumplimiento efectivo”.

La condena en expectativa es de un año de prisión como mínimo y 16 como máximo.  Atencio, obviamente, no estuvo de acuerdo con la conclusión de la defensa.