Peligra el comienzo de clases tras el receso invernal

Los gremios estatales anunciaron ayer un paro provincial para el 12 de julio y aseguraron que, en caso de no haber respuestas, correrá riesgo el inicio del ciclo lectivo tras las vacaciones de invierno. Incertidumbre sin fin

El inicio del ciclo lectivo en la Provincia de Buenos Aires tras el receso invernal entró ayer en una etapa de incertidumbre, luego de que los gremios del Estado anunciaran un paro de actividades para el próximo 12 de julio, y advirtieran que, en caso de no haber respuestas del gobierno de María Eugenia Vidal, podrían no comenzar las clases el 1º de agosto.

En un encuentro realizado en la sede de ATE en Capital Federal, el gremio dueño de casa, más el Sindicato de Obreros y Empleados de la Minoridad y la Educación (Soeme), Suteba, Udocba, la Federación Nacional Docente, la AJB y Cicop, pidieron soluciones urgentes a la administración de Cambiemos para “modificar el estado de situación en que se encuentra la Provincia”.

Con el objetivo de contar los detalles de cómo será la jornada de protesta, los gremios dejaron en claro la escasa “convicción” de Vidal para arribar a acuerdos con los trabajadores y culparon al gobierno por los palos en la rueda que se le está poniendo a la actividad pública en terreno bonaerense.

Situación complicada

La paritaria estatal todavía no resuelta, más la actitud beligerante del gobierno de Vidal de no acceder a los fallos de la Justicia, que ordenó reabrir la negociación salarial, ha generado que los trabajadores tomaran un accionar más duro contra la política oficial.

Entre los asistentes al convite, estuvo el titular de ATE Provincia, Oscar de Isasi, quien aseveró a Hoy que “desde el gobierno vienen anunciando que pueden no empezar las clases luego del receso invernal por la intransigencia sindical, pero quien garantiza el no inicio de clases el 1º de agosto es Vidal con su política de ajuste. En todo caso, nosotros nos vamos a poner al frente de la pelea para recomponer los salarios”.

Contrariamente al discurso a favor del diálogo que Cambiemos esgrime en público, la administración bonaerense viene haciendo oídos sordos a los reclamos de los trabajadores. 

En ese sentido, Susana Mariño, secretaria adjunta del SOEME, recalcó a nuestro diario: “En caso de que no haya alguna clase de respuesta por parte del gobierno de María Eugenia Vidal, veremos si el 1º de agosto empiezan otra vez las clases o no en la Provincia, porque la situación ya es insostenible y los compañeros nuestros ya no dan para más”.

Por su parte, Miguel Díaz, secretario general de Udcoba, destacó que “el gobierno se oye a sí mismo, pero no escucha a los trabajadores. Exigimos una recomposición salarial que nos ayude a afrontar la vorágine inflacionaria y un sueldo mínimo de $ 12.000. Si las clases no empiezan en agosto, es exclusiva responsabilidad del gobierno”.

La administración provincial insiste con un aumento para los estatales del 25% en forma anual, y afirma por lo bajo que no dará ninguna clase de aumento a los demás gremios para el segundo semestre. 

El paro del 12 de julio y la posibilidad certera de que las clases no comiencen tras el receso invernal, llenan de incertidumbre el futuro bonaerense.

IOMA, el foco del conflicto

La denuncia publicada por el diario Hoy señalando las supuestas anomalías en el Instituto de Obra Médica Asistencial (IOMA), con el procesado tendiente a contratar un servicio de ambulancias para los afiliados, causa conmoción en la sociedad.

Desde la Asociación de Profesionales del IOMA (Apioma) cuestionaron el contrato de las ambulancias por no haber sido consultados desde el gobierno provincial. Además, consideran que es irregular el procedimiento iniciado por no existir ningún estudio epidemiológico ni de costos, así como tampoco por no estar previstas auditorías para su control.

En el cónclave sindical organizado ayer en la sede porteña de ATE, el tema de la obra médica bonaerense no estuvo fuera del debate, sino que, por el contrario, fue parte importante en el mismo.

Raúl Calamante, secretario de Interior de Suteba, le afirmó a Hoy que “en el tema de las ambulancias hay algo atrás que no conocemos. Si tomamos como referencia lo que los gremios pagamos per capita en el conurbano, donde abonamos $ 3,50, y el IOMA hace un llamado a $ 17 pesos, y encima es una licitación que salió un solo día para un negocio de $ 400 millones anuales, algo raro hay atrás”.

“Tener este apuro, en lugar de tratar de ver cómo se transparenta, y hacer un llamado a licitación cuando hay empresas que la cuestionaron porque no han estado en la misma igualdad de condiciones para ser convocados, nos parece cuestionable”, manifestó Calamante. 

Los gremios objetan además algunos contratos de locación del IOMA, que se están haciendo sin respetar las carreras de la obra social, y que, con el argumento de la emergencia, desde la obra social se usa la misma para hacer este tipo de contrataciones espurias y poco claras.

Tarifas impagables

Los tarifazos a los servicios públicos han generado que un importante sector de la sociedad se vea impedido de abonar los mismos por las altas cifras que han venido en sus boletas, con aumentos que han trepado hasta el 1.200%.

Ayer, en la reunión sindical en ATE, los gremios dejaron expuestos sus reclamos al gobierno de María Eugenia Vidal para que atienda las necesidades de los sectores más vulnerables, los más afectados por los tarifazos.

“Si comemos, no podemos pagar los servicios como la luz, el agua y el gas. Esa es la situación real porque con lo que ganamos ya no alcanza para cubrir los gastos esenciales”, fue una de las frases más escuchadas por parte de los dirigentes sindicales que se han puesto al frente de la pelea por el alza de los precios y las tarifas.