Sueños Compartidos: procesan a Hebe de Bonafini y a los hermanos Schoklender

El juez federal Marcelo Martínez de Giorgi procesó ayer sin prisión preventiva al exapoderado de la Fundación Madres de Plaza de Mayo, Sergio Schoklender, y a la presidenta de la entidad, Hebe de Bonafini, por el desvío de fondos públicos destinados a la construcción de viviendas, mientras que el exministro Julio de Vido  recibió la falta de mérito.

El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal nº 8 procesó además a Pablo Schoklender; al exsecretario de Obras Públicas, José López  (detenido mientras intentaba ocultar más de nueve millones de dólares en un monasterio) y al exsubsecretario de Obras Públicas, Abel Fatala, por el delito de “defraudación a la administración pública por administración fraudulenta”.

A todos ellos, al igual que a la presidenta de la asociación Madres de Plaza de Mayo, el juez Martínez de Giorgi les dispuso un embargo de 250 millones de pesos, “suficientes para satisfacer las costas del proceso”.

En la causa se investiga el desvío de fondos públicos entregados por la Secretaría de Obras Públicas de la Nación para la construcción de viviendas que fueron adjudicadas a la Fundación Madres de Plaza de Mayo, en el marco del proyecto Misión Sueños Compartidos.

Se consideró probado en el expediente que los hermanos Schoklender, en su calidad de apoderados de la Fundación, tuvieron una activa participación en la gestión y ejecución de las construcciones que se adjudicaron a esa institución y que, con posterioridad, una vez ingresados los montos correspondientes a esas obras en las arcas de la institución, desviaron más de 206 millones de pesos.

El escándalo en torno al programa Sueños Compartidos estalló a mediados de 2011, poco antes de que la entonces presidenta Cristina Kirchner  buscara su reelección: tras una primera investigación del exjuez Norberto Oyarbide, el caso fue reactivado años después por Martínez de Giorgi.