Continúa el acampe de cooperativistas frente a un hipermercado

Se trata de una protestas de trabajadores de coooperativas. Ayer movilizaron a la cámara de supermercadistas y acamparon finalmente frente al Carrefour de Boedo. Hoy habrá corte de calle hasta el mediodía. Reclaman descuentos de impuestos en artículos de primera necesidad. 

Trabajadores de Cooperativas de Programas gubernamentales y otras "autogestionadas" se movilizaron ayer a la cámara de empresarios de supermercados ASU (Asociación Supermercados Unidos) en la calle Cerviño 4417 de la Ciudad de Buenos Aires. Piden un descuento en los alimentos y productos de primera necesidad  ya "que trabajan con uno de los sueldos más bajos y con una importante precarización".

La protesta comenzó ayer al mediodía y a la noche acamparon frente a Carrefour a la espera de una respuestas a lo que piden.

Estos trabajadores son, en algún sentido, trabajadores a cargo del Estado, ya que este mismo los contrata; sin embargo "el gobierno nacional nos niega el más elemental derecho a tener negociaciones paritarias en todos los casos en los que éste actúa como empleador regular de nuestra mano de obra", explican los cooperativistas.

Además agregan que "tenemos el ingreso salarial quizá más bajo del país (alrededor de $2000 en promedio), padecemos las condiciones laborales más precarizadas que puedan existir, y ni siquiera se avizora la posibilidad de obtener un aumento en nuestros ingresos que sirva para paliar la pavorosa inflación que se empeña en mantenernos hundidos en la pobreza". 

A pesar de que la protesta es a la situacion laboral que los obliga a vivir el gobierno nacional a través de fuentes laborales en forma de cooperativa con los sueldos más bajos y con una importantísima precarización laboral, decidieron enfrentar sus demandas frente a las cadenas de supermercados más grandes del país. 

Según las organizaciones sociales que protestan hoy, los supermercados (tanto grandes como barriales) "mantienen márgenes de ganancia muy significativos, gracias a una vertiginosa e infundada escalada de precios a la que, a pesar de todo lo que se habla, nadie le pone un freno"; y agregan en su comunicado de prensa que "el IVA en los alimentos sigue golpeando a nuestros bolsillos como a nadie más, dado que prácticamente la totalidad de lo que ganamos se consume en sostener la subsistencia de nuestras familias.

Entonces lo que se reclama, tanto al Estado Nacional como a las distintas empresas distribuidoras y productoras de alimentos, es "la instrumentación de convenios especiales que permitan abaratar el acceso para los trabajadores más postergados y más precarizados, de todos aquellos medios necesarios para su más elemental subsistencia, a través de exenciones impositivas (IVA y otros impuestos), y también del achicamiento de los generosos márgenes de ganancia que dichas empresas obtienen cuando le venden productos de primera necesidad al pueblo trabajador".