Vergonzoso: La Cámpora quiere a Sergio Berni como gobernador de la Provincia

La agrupación ultrakirchnerista estaría viendo con buenos ojos la postulación del secretario de Seguridad de la Nación frente a la falta de referentes a nivel bonaerense. ¿Se viene un candidato “buche”?

Un momento de total incertidumbre está atravesando el Gobierno nacional de cara a las futuras elecciones de 2015. Y, en este marco, la ausencia de referentes sólidos en el seno del kirchnerismo hace que ya se empiecen a barajar figuras insólitas, personajes que difícilmente puedan sortear sin problemas los más duros embates a nivel económico, político y social.

Una clara muestra de esto último es el rumor que empezó a circular con fuerza en los pasillos del poder: los trascendidos dan cuenta de que, dentro de la cúpula de la agrupación ultra K La Cámpora, hay quienes no verían con desagrado la postulación del secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, a gobernador en la provincia de Buenos Aires. Algo realmente llamativo, sobre todo teniendo en cuenta el nefasto prontuario que arrastra el funcionario oficialista.

Los curiosos argumentos que desplegaron desde el camporismo para justificar la candidatura de Berni están, más que nada, basados en estadísticas porcentuales. De acuerdo a los trascendidos, el secretario de Seguridad “mide bien” en los sondeos de opinión pública, incluso por sobre otros hombres del riñón K (como Diego Bossio, a cargo de la Anses, o de Julián Domínguez, actual titular de la Cámara de Diputados).

Un fiel soldado K, dueño de la mano dura

Sin embargo, la verdadera razón tendría que ver con que Berni -un ex médico militar- está visto como un funcionario que apela a la “mano dura” a la hora de combatir la inseguridad y la conflictividad social. De hecho, a contramano de lo que plantea su espacio político, se mostró en contra de los proyectos de ley que buscan regular los cortes ya que, según su propia visión, el Código Penal los prohíbe de lleno.

Pero de lo que no hablan en La Cámpora es del pesado historial que ostenta el secretario de Seguridad. Además de protagonizar verdaderos papelones en situaciones que ameritaban una respuesta seria (como ocurrió con las sobreexposiciones mediáticas en hechos de inseguridad o sus declaraciones poco diplomáticas sobre los cacerolazos), Berni tuvo un rol preponderante como “buche” o “servicio” de la familia presidencial, infiltrándose en grupos opositores a las políticas kirchneristas cuando Néstor Kirchner era gobernador en Santa Cruz.

Otro antecedente que el ultraoficialismo prefirió eludir estratégicamente para empezar a foguear a Berni como postulante en la Provincia tiene aristas demasiado oscuras: el 30 agosto de 2012 (el “Día del Detenido Desaparecido”), el secretario K bajó en helicóptero en la Autopista Panamericana para desalojar violentamente a integrantes de movimientos de desocupados. Y los 65 detenidos por el hecho fueron enviados a Campo de Mayo, sin tener en cuenta que se trata de un símbolo de la dictadura militar y es el lugar en donde funciona el centro de espionaje del Proyecto X. Un dato no menor, que arroja más sombras que luces sobre la silueta del posible “candidato carapintada K”.