Basuras farsantes

Cinco falsos operarios fueron detenidos en el centro y sus inmediaciones, acusados de hacerse pasar por empleados de una empresa de residuos y sacarle dinero a los vecinos del lugar  

Cinco personas fueron detenidas en las últimas horas, acusadas de engañar a los vecinos haciéndose pasar como empleados de una empresa de recolección de basura, cuando en realidad no lo eran, con el fin de sacarles dinero. 

Efectivos de la jefatura Distrital Centro, junto a los del Comando de Patrulla Comunitaria, personal de la Patrulla de Prevención Municipal y agentes de la DDI local fueron alertados por diversas denuncias al 911 acerca de una banda vestida con prendas de la empresa ESUR y con identificaciones que recorrían las calles de La Plata, sobre todo en la zona céntrica, solicitándole dinero a los frentistas por el servicio de la recolección de residuos.  Ofrecían además venta de bolsas de basura de color negra y otras verdes, refiriendo que eran las recomendadas por la Municipalidad para arrojar los desperdicios. 

Recorriendo diversas zonas, lograron demorar a cinco de ellos, todos vestidos de la manera que referían los denunciantes. En su poder tenían las mencionadas bolsas de residuos y credenciales que supuestamente los identificaban como empleados de dicho empresa. 

Abuelos engañados

Los pesquisas llamaron entonces a ESUR, y desde allí refirieron que no tenían ningún empleado autorizado a pedir dinero por la recolección de residuos o venta de bolsas y que, de hecho, eso está prohibido, ya que cada empleado tiene su sueldo y ningún vecino tiene que pagar por el servicio de la recolección. 

Ante esto se identificó a los sospechosos, todos mayores de edad y oriundos de la localidad de La Matanza, quienes no tenían vinculo alguno con ESUR y simulaban serlo para obtener un provecho personal. En su poder tenían 3000 pesos en billetes de baja denominación, credenciales apócrifas y prendas (camperas, remeras y pantalones) con logos de la empresa.

Llevados a la dependencia de la DDI, se supo que tres de ellos tenían antecedentes y pedido de captura por diferentes delitos, por lo que quedaron a disposición de la UFI número 11, al mando de Álvaro Garganta.

A su vez, habiendo efectuado un relevamiento vecinal por la cuadra donde los causantes fueron interceptados, varios frentistas habían abonado dinero, algunos de ellos refiriendo que creían que efectivamente eran personal de ESUR por las ropas y credenciales que exhibían, y otros porque tenían miedo que no pasaran más a buscar la basura. La mayoría de ellos que dieron dinero son gente de avanzada edad que caían en el engaño.