Agredieron a dos hermanas en el barrio Las Quintas

La madre de las víctimas aseguró que realizó la denuncia en la subcomisaría La Unión. Sin embargo, el expediente nunca llegó a Tribunales. El atacante continúa en libertad

Dos hermanas de 23 y 14 años fueron brutalmente golpeadas y amenazadas por el exsuegro de la mayor, en una vivienda del barrio Las Quintas. Ahora, la madre de las víctimas denuncia que la declaración de las chicas quedó cajoneada en la comisaría y que jamás llegó a Tribunales.

El hecho se produjo el 21 de diciembre pasado, pero el entramado de la historia se remonta algunos meses atrás. Yamila, la joven de 23 años, había quedado a cargo de la casa de su ex cuando el hombre resultó detenido, acusado de abuso sexual.

Sin embargo, esto no fue bien visto por Eduardo, el padrastro del muchacho arrestado, quien se las rebuscó para recuperar el inmueble junto con su hija y algunos conocidos. Tan es así que, cuando Yamila y su hermana acudieron la semana pasada a la casa de 137 y 529 en busca de algunas pertenencias y electrodomésticos, fueron salvajemente atacadas por el hombre. 

Según Gabriela Gamarra (46), madre de las damnificadas, el agresor las amenazó con apuñalarlas y las golpeó en el rostro y en distintas partes del cuerpo. “Cuando las chicas llegaron al lugar, encontraron ropa y otras cosas tiradas en la vereda. Entraron a la casa y fueron recibidas a golpes”, comentó la mujer a Trama Urbana. 

Asimismo, explicó que el implicado habría estado en prisión por casos de violencia de género hacia su pareja y que se habría fugado de un instituto psiquiátrico en el cual estuvo internado. Lo cierto es que, después del ataque, la mayor de las hermanas viajó a San Miguel del Monte con su pequeña hija hasta la vivienda de su padre para resguardarse. “La menor de 14 está encerrada en casa, no puede salir porque está amenazada”, aseguró Gabriela.

La denuncia, cajoneada 

Tras el episodio, la madre de las chicas las llevó al hospital para que fueran atendidas y posteriormente realizó la denuncia en la subcomisaría La Unión: “El martes pasado estuve más de dos horas en tribunales para que me dijeran que ellos no tenían la denuncia, que las declaraciones de mis nenas nunca habían salido de la comisaría. Estoy indignada”.

La preocupación mayor es que el hombre continúa en libertad y sigue amenazando a la familia: “Finalmente él se quedó en ese lugar y nosotras recibimos constantes amenazas de muerte. Me tiran piedrazos y botellazos a mi casa. Estamos con miedo y sentimos desamparo frente a la situación. Estas cosas, que veo por televisión, hoy las estoy viviendo en carne propia”. 

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