Barreda dijo que se arrepiente de haber matado a su familia

En una charla con un enfermero, Ricardo Barreda, de 80 años, admitió que se arrepentía de haber matado a su hija menor, Adriana. "Estaba como loco, giré, disparé y después me di cuenta que era ella", dijo.

El anciano, quien ya cumplió su condena, según la justicia, pasa sus días en terapia intermedia del hospital Magdalena V. de Martínez, en Pacheco, partido de Tigre.

En un entrevista, Barreda volvió a recordar la noche del 15 de noviembre de 1992, en la que en su casa de la calle 48 de La Plata asesinó a su esposa Gladys McDonald (57), su suegra Elena Arreche (86), y sus hijas Cecilia (26), y Adriana, de 24 años.

El anciano dijo que se arrepiente de los asesinatos, no sólo del de su hija menor sino de los cuatro. "A las cuatro, sí. No vamos a establecer diferencias", dijo.