Delincuentes mantuvieron cautiva a una familia durante una entradera

Sorprendieron a dos de las víctimas cuando ingresaban a su hogar. Se llevaron dinero y objetos de valor. Pasó en barrio Hipódromo

Cuatro delincuentes ingresaron a una casa de barrio Hipódromo y mantuvieron cautivas a una abuela y su nieta. Más tarde sorprendieron también a la madre de la familia, que se encontró con los ladrones ya dentro de la propiedad y estos la retuvieron junto con las otras mujeres, por lo menos durante dos horas.

El hecho se dio en una vivienda ubicada en 115 y 37, alrededor de las 14, cuando cuatro ladrones sorprendieron en la puerta del domicilio a dos de las víctimas, Alicia de Capeli (76) y su nieta de 18 años. Según relataron voceros oficiales a Trama Urbana, los delincuentes las obligaron a ingresar a la casa sin exhibir arma alguna.

“Venían de hacer unas compras y las agarraron cuando estaban por entrar”, contó a este medio Guillermo Capeli, el padre de la familia. “Las llevaron a la cocina y las ataron a unas sillas. Cuando ya estaban revisando la casa llegó mi esposa, que no se dio cuenta de lo que estaba pasando y la sorprendieron a ella también”, agregó.

Una vez maniatadas las tres mujeres, los malhechores comenzaron a recorrer la vivienda, revisando cada una de las habitaciones. “La casa quedó hecha un desorden, dieron vuelta todo”, señaló el dueño de la propiedad asaltada y comentó que los delincuentes se violentaron con su esposa, identificada como Fabiana Baños (46): “A ella le dieron un cachetazo cuando intentó resistirse, pero por suerte se encuentra bien, no le hicieron nada más grave”.

“Se llevaron televisores, computadoras e incluso oro y dinero en efectivo que había en la casa”, relató Guillermo, y agregó que los asaltantes “revisaron todas las habitaciones, por lo que todavía no sabemos bien qué es todo lo que nos robaron”.

El hecho duró cerca de dos horas y, una vez perpetrado el robo, los malvivientes se dieron a la fuga con el cuantioso botín. Por el momento, la Policía desconoce su paradero. “Vamos a tener que cambiar la cerradura porque también se llevaron las llaves de la casa”, agregó el damnificado.

“Mi hijo fue el que las encontró y fue él quien las liberó y dio aviso a la Policía”, detalló el hombre. “Yo trabajo en Capital Federal y me enteré de todo cuando volví. Por suerte están todos sanos y salvos”, concluyó.