El peor final

El cuerpo sin vida del menor de 17 años que había desaparecido el domingo en el río, en Los Talas, fue encontrado ayer en Berisso, en una desembocadura del canal Mena. Conmoción en la zona y entre los familiares del joven

El milagro no llegó, pese a que las esperanzas nunca perecieron. Durante la tarde de ayer, tras una búsqueda que duró más de un día, apareció el cuerpo sin vida del joven de 17 años que había desaparecido el pasado domingo en Los Talas, informaron fuentes policiales. 

Alrededor de las 17, bomberos voluntarios, personal de la Prefectura y de Defensa Civil, además de agentes de la comiaría Segunda de Berisso al mando de su titular Luis Romero, divisaron el cadáver del menor, en la desembocadura del canal Mena que conduce hacia el río, en las proximidades de la calle Bagliardi. 

De inmediato fue retirado del agua, pero ya nada se podía hacer por él. Poco después se acercaron a la zona peritos, quienes trabajaron en el lugar. 

Un pesquisa abocado a la investigación descartó que el joven se haya metido al río para nadar, debido a las altas temperaturas que azotaron la ciudad en los últimos días. 

“Estaba (anteayer) con otros dos amigos, todos de entre 17 y 18 años y de la zona de 145 bis y 45. No se metieron a nadar ni a pescar. Simplemente se introdujeron un poco más de lo que lo tuvieron que haber hecho, mientras charlaban pasando la tarde”, reveló la fuente, quien estableció que los amigos de la víctima también estuvieron cerca de ser succionados por los pozos que se forman en la superficie. 

Hoy se llevará a cabo la operación de autopsia, y la causa será recalatulada, pasando de “averiguación de paradero” y de “averiguación de ilícito” a “muerte por accidente”.