Entradera violenta en Gonnet: ataron y golpearon a un hombre

Ocurrió cuando la víctima entraba a su casa luego de dejar a sus hijos en el colegio. Dos sujetos armados lo sorprendieron y lo obligaron a entrar a los golpes. Huyeron con dinero y lo dejaron amordazado 

En Gonnet los vecinos hablan de los robos como un ganadero cuenta vacas en el campo. Los relatos de la inseguridad, en los últimos tiempos, van desde entraderas a crímenes intrafamiliares; desde asaltos “al voleo” a otros tipo comando. Esta vez, un hombre sufrió una dramática entradera en 509 entre 15 y 16 cuando volvía a su casa luego de dejar a sus hijos en el colegio. Lo ataron de pies y manos con su propia corbata y sus cordones, y le robaron bienes de su vivienda. 

El hecho, como adelantó diario Hoy  en su versión digital, sucedió pasadas las 8 del viernes cuando dos sujetos, de entre 18 y 25 años, advirtieron que un vecino estaba abriendo una reja. Allí se acercaron sin mediar palabra, lo encañonaron y le dieron un par de empujones hacia adentro de la vivienda. “Lo tiraron al piso, siempre apuntándole, y lo ataron con cordones y corbatas, que agarraron del lugar. La secuencia fue muy violenta, porque también le pegaron en las costillas y en la nuca estando en el suelo”, contó un frentista de la zona. 

Este medio se comunicó con la víctima, que refirió estar en shock  y con temor porque hace unos años sufrió un hecho semejante. “En aquel tiempo, después del robo, viví encerrado y hasta en una especie de paranoia. Veía a alguien en la calle y pensaba que me iba a asaltar. Acá en Gonnet estamos pasando por algo similar, nos sentimos tan desprotegidos que pasamos a realizar una caza de brujas permanente, porque alguien nos parece sospechoso y enseguida llamamos a la Policía o nos resguardamos bajo veinte candados y cámaras por todos lados”, dijo. 

El damnificado añadió que tiene tres hijos varones y uno de ellos, enterado del episodio, también entró en shock. “Pretendo desdramatizar; no quiero seguir viviendo con miedo. Pero tenemos que solucionar el problema de la inseguridad, porque tiene un efecto psicológico para toda la familia”, refirió.

De acuerdo con los investigadores, el hecho duró cerca de una hora y media. Una vez dentro de la finca, los cacos preguntaron dónde estaba el dinero, amedrentando a la víctima. “Revisaron todos los ambientes, les dije dónde estaban mis ahorros, los tomaron, pero no se conformaron y continuaron buscando, me tuvieron de rehén. Encontraron otra parte de la plata y también joyas, celulares y destrozaron una notebook. Fueron violentos hasta que se hicieron del botín y recién ahí se tranquilizaron. Mi teléfono no se lo llevaron porque lo había dejado en el auto”, explicó. 

Los malvivientes huyeron dejando al hombre atado y amordazado. “Pudo zafarse por su propia cuenta recién una hora después de que salieran de la casa”, narró un vecino, quien conjeturó que la modalidad del asalto fue “al voleo” porque los maleantes iban a pie por la vía pública, e incluso desistieron de sustraer el vehículo del damnificado.

“Pasó una mañana de terror por culpa de la maldita inseguridad y lo dejaron en la ruina, porque perdió sus ahorros para lo que resta del año”, concluyó el frentista, amigo de la víctima.