Peleas, destrozos y heridos, durante una fiesta de jóvenes

Ocurrió en la puerta de una casa donde se celebraba un evento privado, en inmediaciones del Parque Saavedra. Los disturbios empezaron cuando un grupo de chicos no pudo ingresar. Hasta el momento, no hay detenidos

Lo que comenzó como una fiesta normal, en el marco del fin de semana largo, terminó en una verdadera batalla campal. En horas de la madrugada de ayer, un grupo de personas que concurría a una celebración privada, en la zona de 16 entre 68 y 69, protagonizó importantes disturbios que incluyeron piedras, golpes y botellazos. 

“El conflicto se generó porque una banda de chicos quería entrar cuando la casa ya estaba llena. Como no los dejaron ingresar, se enojaron y empezaron a romper cosas en la puerta. Del interior salieron un par para contenerlos y se agarraron a golpes en la calle”, le explicó a Trama Urbana uno de los jóvenes que estuvo en la celebración. 

El incidente empezó en la madrugada y se prolongó hasta la primera luz del día. Varios vehículos que estaban estacionados en la cuadra terminaron con los vidrios rotos, entre ellos los de algunos vecinos del barrio. “Quedó lleno de esquirlas por todos lados. Hace unos diez años que vivo acá y es la primera vez que pasa algo así”, relató un frentista. 

Algunos padres de los involucrados en el hecho concurrieron a la vivienda en horas de la mañana. “Estamos preocupados, no podemos creer cómo se pudieron lastimar tanto. Si uno recorre la cuadra, parece una imagen de guerra”, dijo uno de ellos, quien, extraoficialmente, manifestó que un grupo de jóvenes, de entre 18 y 25 años, fue trasladado a un nosocomio cercano, aunque sin heridas de consideración. 

“Se escucharon gritos; un grupo amenazaba de muerte a otro, espié por la ventana y vi a varios muchachos con el torso desnudo, enfrentándose a botellazos y a golpes de puño. Fue horrible. Mi hijo se despertó y no pudo dormir en toda la noche”, agregó una lugareña, que vive al lado de la finca donde sucedió la fiesta.

Si bien ciertos vecinos indicaron la presencia de patrulleros en el hecho, hasta el cierre de esta edición no se constataron detenidos. “Lo que sí hubo fueron denuncias por ruidos molestos, porque la música estaba a todo volumen y después, por la pelea, todo fue un caos. Era insoportable”, concluyó una se­ñora, que llamó al 911 en el epicentro de los disturbios. 

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