Jubilados: blancos fáciles

Cada 12 horas, se registra un robo que tiene como víctimas a personas de la tercera edad. En la ciudad, hubo cuatro casos seguidos

Solo en la última semana, en las páginas de Trama Urbana se vieron reflejados cuatro violentos robos que tuvieron como víctimas a diferentes jubilados de nuestra región, en un flagelo que creció en el último tiempo y que se aprovecha de atacar al más débil. 

El martes pasado, delincuentes sorprendieron a un hombre de 72 años en su residencia de Arturo Seguí y le sacaron 40.000 pesos, y en este caso, el damnificado se salvó de ser golpeado. Al día siguiente, sorprendieron a un matrimonio de 73 y 66 años, mientras dormía en su vivienda de Ensenada. Les quitaron 23.000 pesos, objetos de valor y hasta su auto. El jueves, otra pareja, de 83 años, fue golpeada por un grupo de maleantes, que huyó con dinero. Por último, también el jueves, ladrones ingresaron a la finca de una señora de 88 años, en Ringuelet, a quien golpearon y robaron. 

“Antes no pasaba de una estafa”

Un relevamiento de especialistas en la temática reveló que los robos violentos a adultos mayores se repiten cada vez con más frecuencia en el país, llegando a registrarse uno cada 12 horas solo entre la Capital Federal y el Conurbano bonaerense.

El defensor del Pueblo de la Tercera Edad, Eugenio Semino, advirtió que “hace más de una década que esto desgraciadamente es más habitual. Antes no pasaba de una estafa, pero hoy se perdió el freno inhibitorio de pegarle a los abuelos. Incluso hubo una cantidad importante de homicidios en ocasión de robo. Existe mucha saña. Se amenaza y se utilizan armas blancas u objetos contundentes, incluso cuando la víctima no ejerce resistencia”.

Explicó, además, que estos asaltos se producen en modo de “salideras o en el domicilio de los perjudicados”, tal como ocurrió en una vivienda de Quilmes, donde los hampones no solo robaron dinero sino también provocaron serios destrozos, manteniendo retenidos durante casi tres horas a una mujer de 77 años y a su esposo, de 73, “pegándoles a ambos en la cabeza y atándolos”.    

Semino finalizó asegurando que “este tipo de ataques salvajes a adultos mayores son un flagelo que cada vez se repite con más frecuencia en la Argentina”. 

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