Le depositaron 130.000 pesos por error, los gastó y terminó presa




La mujer asegura que esperaba una indemnización y por eso creyó que la plata era suya.

Natalia Paola Rodríguez Díaz, una sanjuanina de 37 años, en febrero pasado encontró que en su caja de ahorro le habían depositado 130 mil pesos. Creyó haber cobrado una indemnización pendiente y, sin más, empezó a usar la plata. Pero una semana después la llamaron del banco para decirle que había sido un error y le exigieron que la devolviera la plata. La mujer se negó, discutió y terminó en la Justicia acusada de estafa. Y hasta llegó a estar presa durante el último fin de semana. La causa judicial sigue y ella se resiste a entregar lo que considera propio.

La mujer, que es empleada del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), afirmó -ante el banco primero y en la Justicia después- haber creído que se trataba del pago de un seguro por accidente de trabajo que le correspondía.

Su abogado, Diego Sanz, explicó que su clienta, que vive en el barrio Sarmiento, recibió la transferencia bancaria de 130 mil pesos en la caja de ahorro de la que es titular, por un error del banco que debía depositar esa misma suma en una cuenta corriente del gobierno provincial.
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A los pocos días, la mujer descubrió que tenía ese dinero disponible, hizo gastos por 6 mil pesos con la tarjeta de débito y retiró por ventanilla los 124 mil restantes. En aquel momento, Rodríguez declaró en el formulario que deben llenar quienes retiran mas de 40 mil pesos que la plata provenía del pago de un seguro. No especificó cual, ya que la declaración jurada no pregunta nombres de empresas ni otros datos más precisos.

Cuando una semana más tarde el banco le comunicó el error, la mujer se negó a devolver el dinero. Rodríguez fue denunciada por el banco por una presunta estafa y la Fiscalía de Instrucción N°1, a cargo de Daniel Guillén, elevó la causa al juez en mayo. “Hay hechos concretos por los que requerí al juzgado una investigación para determinar la responsabilidad de la dueña de la cuenta”, fundamentó el fiscal.

El viernes pasado, la mujer -que actualmente estaría de licencia en el IPV- fue detenida y permaneció privada de la libertad hasta ayer a la mañana, cuando declaró ante el juez de Instrucción Benedicto Correa. Luego de prestar declaración fue liberada, pero quedó bajo investigación judicial.

Sanz insistió en que su clienta “pensó que el dinero provenía del pago de un accidente de trabajo que ella denunció el año pasado, cuando un día de lluvia resbaló y se lastimó en la puerta del Centro Cívico, donde trabaja” y tras el accidente “los peritos determinaron una incapacidad del 7,5 por ciento”. Y consideró que “como ella declaró cuando retiró el dinero que se trataba del cobro de un seguro, no hay delito penal, sino que lo que pasó es que hubo negligencia del operario bancario que se equivocó al hacer la operación, ya que debía depositar en una cuenta corriente y lo depositó en una caja de ahorro con el mismo número (tiene un número que identifica a la sede, seguido del 1133/2), pero que difieren en el código de clasificación bancaria”.

¿Cómo fue el error bancario? Según la documentación judicial, las dos cuentas -la de Rodríguez y la gubernamental- tienen el mismo número, pero la diferencia radica en que una es una caja de ahorro y la otra es una cuenta corriente. Desde la Justicia creen que el error del banco (no se reveló qué banco es) se produjo cuando se hizo una transferencia de pago de 130 mil pesos desde una cuenta gubernamental de la provincia a una empresa que se llama Frutas Argentinas. Al parecer, esa empresa tuvo un problema administrativo para recibir el pago, por lo que el banco canceló la transferencia y devolvió el dinero, pero en lugar de depositarlo en la cuenta corriente gubernamental, lo hizo en la caja de ahorro de Natalia Rodríguez.

El error se produjo el lunes 23 de febrero. De acuerdo con lo denunciado en la fiscalía, la dueña de la cuenta hizo una consulta de los últimos movimientos en el cajero automático y así descubrió que le habían depositado 130 mil pesos. Según consta en la denuncia, al 20 de febrero último -una semana antes del error bancario-, la mujer tenía en su cuenta 2,85 pesos y en la denuncia aclaran que cobra un sueldo de 5.500 pesos.

“En ese punto es que la mujer habría incurrido en la figura delictual de la estafa, tal como lo prevé el artículo 172 del Código Penal. Tal vez, si no hubiera mentido, el presunto delito podría haber sido una estafa atenuada, prevista en el artículo 175, inciso segundo”, explicó el fiscal Guillén. Pero ella se mantiene firme: jura que nunca mintió y dice que no tiene por qué devolver nada.

El artículo 172 del Código Penal estable una pena de prisión que va de 1 mes a 6 años para el que "defraudare a otro con nombre supuesto, calidad simulada, falsos títulos, influencia mentida, abuso de confianza o aparentando bienes, crédito, comisión, empresa o negociación o valiéndose de cualquier otro engaño o ardid”.

El artículo 175, inciso segundo -el que podría haber incurrido la mujer si no se valía de una declaración jurada-, dice que "será reprimido con multa de 1.000 a 15.000 pesos el que se apropiare una cosa ajena, en cuya tenencia hubiere entrado a consecuencia de un error o de un caso fortuito".