Madre de la víctima complicó al “cuchillero”

La mujer dijo que el faenador del frigorífico de Gorina había amenazado a su hijo varias veces antes de matarlo a puñaladas 

a madre del penitenciario Daniel Zamorano (35) –asesinado de varias puñaladas en el abdomen- declaró ayer en el marco del juicio oral a Cristian Marcelo Enciso (33) alias “el cuchillero”. Aseveró que existieron agresiones previas al ataque, develó conflictos familiares y confirmó que también su familia había sido amenazada.

La testigo estuvo en pareja con el padre del acusado. El proyecto de familia ensamblada no funcionó. La relación nunca fue buena entre los hijos y, tras la separación, se profundizaron las peleas que derivaron en una fatalidad.

Yanina Zamorano -hermana del fallecido-  sostuvo en su declaración que ella no formó parte de la pelea previa al crimen, pero sí aseguró que vio a Enciso intentar esconder la cuchilla, que arrojó en un descampado durante su intento de fuga. Horas más tarde, el joven se entregó en la Jefatura Distrital de Villa Elvira.

El juicio oral ingresó en un cuarto intermedio hasta el próximo lunes 21 de abril. Ese día se espera la declaración de médicos forenses. Luego se realizarán los alegatos.

El Tribunal III de La Plata, según informa Tintajudicial.com, compuesto por Ernesto Domenech, Andrés Vitali y Santiago Paolini, está a cargo del debate. La parte acusadora se integra la fiscal Silvina Langone y el abogado Marcelo Peña, quien asiste a la familia Zamorano. En tanto, la defensa es ejercida por Ricardo Bianchi y Juan Di Nardo, bajo la hipótesis de la legítima defensa. 

La tesis que procura acreditar la fiscalía y la querella durante el juicio apunta a un crimen de índole familiar. Al parecer, la madre de Enciso había sido pareja del padre de Zamorano. Luego se habrían producido varios desencuentros, “muy típicos en los casos de familias ensambladas” que derivó en “denuncias cruzadas”. Según esa hipótesis, la confrontación se extendió al nivel de los hijos: Daniel Zamorano y Cristian Enciso, quienes quedaron muy enfrentados.

El día del hecho, se había iniciado con una virulenta gresca entre mujeres, entre ellas, las parejas de la víctima y el supuesto victimario.

Zamorano llegó después. Se le acercó a Enciso. Los ánimos no se calmaron. Y terminaron de la peor manera: Zamorano sufrió tres certeras puñaladas que acabaron con su vida.

Enciso fue capturado a fines del año pasado, cuando la madre de la víctima lo vio juzgando al fútbol en la cancha de 32 y 135. Ese mismo día -24 de octubre de 2013-, el acusado fue apresado y devuelto a una unidad penitenciaria.

El crimen de Zamorano se prdujo el 7 de noviembre de 2011, en calles 32, 155 bis y 156, delante de la peluquería que pertenecía al padre de la víctima.

A las pocas horas del hecho, Enciso se entregó. Ante la fiscal de instrucción Virginia Bravo, se negó a declarar.