Se llevan cautivo a un hombre tras robo en City Bell

Un caco ingresó a una casa dentro de un barrio privado. Redujo a una mujer y a dos menores. Para escapar, obligó al secuestrado a conducir y lo abandonó en la Autopista 

Una familia de City Bell que tiene su casa dentro de un barrio privado vivió una madrugada de terror cuando ayer fue asaltada por un delincuente fuera de sí, que amenazó constantemente a todos los presentes, entre los que se encontraban dos menores. Terminó llevándose al dueño del lugar cautivo en una camioneta para después dejarlo abandonado en la Autopista La Plata-Buenos Aires y escapar con dinero en efectivo y diferentes objetos de valor, según informaron fuentes policiales.   

Eran las cinco de la mañana cuando un ladrón logró vencer los obstáculos e ingresar a la vivienda emplazada en 480 entre 10 y 11, donde se encontraba descansado Ramiro junto a mujer, su hija y su sobrina. Sin pérdida de tiempo, encañonó a las víctimas y las sometió a minutos de extrema tensión y tortura psicológica. “Nos decía constanemtente que le diéramos toda la plata. Estaba pasado y en todo momento yo traté de tranquilizarlo, más que nada por la nena”, le contó a Trama Urbana el hombre, quien refirió que el caco pudo ganar el interior “por la ventana”. 

Para dominar la situación, encerró a la mujer y los menores en un baño, mientras que con Ramiro “revolvió toda la casa”. A medida que iba obteniendo el botín lo dejaba en la camioneta de los propietarios del lugar, para poder llevárselo a continuación. 

Prófugo 

“Estaba tan pasado que tenía que decirle que se quedara tranquilo. Le decía que todo iba bien, que no se preocupara, que yo lo estaba ayudando”, amplió Ramiro. 

Con todo lo que consideró de importancia asegurado, además de dinero en efectivo,  el maleante emprendió la huida. Pero había un problema: no sabía conducir. Entonces no le quedó otra opción que obligar al hombre a hacerlo, llevándolo cautivo. “Como no manejaba, me hizo trasladarlo hasta la calle 485, pasando del otro lado de la autopista. Recién ahí me hizo bajar y me fui. Él se llevó la mitad de las cosas, rompió el vehículo, cruzó un arroyo y se fue”, detalló. 

Finalmente, el malhechor, que actuaba solo y siempre empuñando el arma, se perdió de vista y poco después Ramiro pudo regresar a su hogar junto a su familia. Llamó al 911 y personal del Comando de Patrullas Zona Norte llegó al lugar y convocó a continuación a sus pares de la 

Comisaría Décima y de la Policía Científica, quienes llevaron a cabo las pericias de rigor para tratar de identificar algo que los lleve hasta el autor del hecho. Sin embargo, hasta el cierre de esta edición se mantenía prófugo. 

Noticias Relacionadas