Martina, la niña hallada junto al cadáver de su madre en Córdoba, fue dada de alta

La nena de un año y nueve meses que fue encontrada junto al cadáver de su madre en una alcantarilla fue dada de alta este miércoles. A partir de hoy vivirá con sus abuelos y tíos

Martina, la niña que sobrevivió 80 horas en una alcantarilla donde había sido arrojada junto al cuerpo de su madre, fue dada de alta hoy del Hospital de Niños y se encontró con sus abuelos y tíos, con quienes comenzará a vivir después del trágico episodio que vivió junto a su mamá.

“La niña vino extremadamente grave, deshidratada, estresada, y pasó 3 días sin ingesta de alimentos. Creemos que Martina es un emblema de la esperanza”, dijo el director del Hospital, Néstor Perotti.

Durante las largas horas que la beba permaneció en la alcantarilla sufrió hipotermia (injuria por frío), falta de alimentación (inanición) y deshidratación.

Esas condiciones le habíam provocado en un principio un desequilibrio metabólico importante, pero pudieron ser superadas con la asistencia médica recibida primero en el Hospital Pediátrico y luego en el de Niños.

La beba y su madre, de 36 años, habían desaparecido el pasado 17 de septiembre, cuando el padre de la niña, Gonzalo Lizarralde, fue hasta la casa supuestamente a darle la cuota alimentaria de la nena. Finalmente, el 21 de septiembre, el empleado de una panadería del barrio Villa Urquiza de Córdoba encontró dentro de un desagüe el cadáver de Acosta y a Martina a su lado.

La emotiva carta del director del Hospital

Néstor Perotti difundió hoy una emotiva carta que le escribió a la niña:

"Con tus ojos tristes y el corazón herido te vimos, y comprendimos el horror de lo inimaginable, mientras sumergidos en nuestro mundo egoísta, pasamos apurados a tu lado sin advertirte, temblorosa y sola en las horas frías y eternas, pudiste desafiar la adversidad aferrándote a la vida, luego nuestros guardapolvos blancos te dieron abrigo, pero cómo te contaremos tu pérdida, cómo te podremos explicar que dañamos lo que más amabas sólo te podremos decir que todo un país rezó por vos", reza la carta.

"Fundiéndose en un arrullo imaginario, que deseo que sanaran tus heridas del cuerpo y el alma, que te sintieras amada, que supieras algún día que nos enseñaste a buscar en lo más profundo de nuestra condición humana, que lograste nos encontráramos nosotros mismos en el otro porque sos símbolo de hierro donde renace la esperanza; y sabes…Martina, nos dimos cuenta que queríamos ser curados, y que eras vos la que estabas sana", concluye Perotti en el emocionante relato.