Prisión domiciliaria para uno de los curas pedófilos del Próvolo

La Justicia le brindó el beneficio al italiano Nicolás Corradi, de 82 años, debido al notorio deterioro en su salud. Deberá pagar una fianza

El cura italiano Nicolás Corradi (82), detenido con prisión preventiva por los abusos sexuales a una veintena de chicos sordos e hipoacúsicos en el Instituto Próvolo de Mendoza, obtuvo la prisión domiciliaria que había solicitado la defensa.

Ese beneficio, que prevé el Código Penal a partir de los 70 años, fue otorgado en base a informes de los médicos de la penitenciaría y del Cuerpo Médico Forense sobre “un notorio deterioro de salud”, “una baja significativa de peso” y el “agravamiento de enfermedades preexistentes” que afectan al religioso.

Corradi, quien ya contaba con denuncias similares en Verona, Italia, y es investigado por otros abusos en el Instituto Próvolo de La Plata, permanecerá detenido mientras espera el juicio en un domicilio ofrecido por la defensa, que no será divulgado para proteger su seguridad. 

Además pagará una fianza de 50.000 pesos y permanecerá con custodia policial y pulsera electrónica para ser monitoreado.

El 22 de diciembre la jueza de Garantías, Patricia Alonso, había denegado el arresto domiciliario a los dos sacerdotes acusados de abuso sexual y corrupción, Corradi y Horacio Corbacho (55), que continuaron tras las rejas junto con un monaguillo, un empleado y un jardinero del Instituto Próvolo de Luján de Cuyo de la provincia de Mendoza.