“Si encuentro más plata, te mato”

Eso le dijeron los ladrones a la señora que protagonizó, junto con su marido discapacitado, un violento robo en su casa de La Loma, en un hecho informado solo por este medio en su edición anterior

Los dos delincuentes que en las últimas horas cometieron una entradera en la casa de un matrimonio de La Loma, en un hecho informado solo por este medio, continúan prófugos de la Justicia, pese al rastrillaje llevado a cabo momentos después del hecho, y la búsqueda realizada durante el día de ayer, señalaron desde la fuerza. 

El robo se materializó en una casa emplazada en 47 entre 29 y 30, donde vive una pareja mayor: el hombre es discapacitado. 

Norma, la dueña del lugar, accedió a charlar con Trama Urbana y comentó: “Me encontraba con mi marido, yo estaba en el lavadero y escuché golpes que me parecieron disparos. En un momento sentí que alguien vino por atrás, me tomó por el pelo y me trajo en el aire hasta la cocina”. Agregó que allí vio a su esposo “tirado en el suelo, sin moverse. La persona que me sujetó a mí, me apuntó con una pistola y pasó por encima de él”. 

Aseguró que en el interior “había otro hombre, también armado, y decía insistentemente que le diera la plata. Yo estaba desesperada para que no lastimen a mi marido, que yo creí que estaba muerto, porque no se movía y había escuchado ruidos como de disparo”. 

Al ir a la habitación, observó a su pareja, la vio moverse y se tranquilizó. Ya en el cuarto, los cacos le siguieron pidiendo efectivo, sobre todo “dólares, algo que no tenía”. Ahí “me golpeó en la cabeza con el arma, para asustarme más. Le señalé dónde tenía unos pesos, revolvieron y se llevaron lo que había. Después siguieron tirando todo y el ladrón me dijo: Si encuentro más plata, te mato”.

“A mazazos”

Norma detalló que los malvivientes “eran dos adentro, pero una vecina me dijo que había otra persona en un auto blanco nuevo, esperándolos”. Dictaminó que, para entrar, “rompieron la puerta a mazazos y ahora la tengo tapiada con placas de hierro atornilladas. Hicieron saltar todas las cerraduras, tengo pedazos de la puerta adentro”. 

Además de escapar con 10.000 pesos y objetos de valor, la mujer detalló que “se llevaron hasta la bolsita que tenía preparada con pañales y remedios para que mi marido lleve hoy (por ayer) al centro de rehabilitación”.

Indignada, destacó: “Hace más de 30 años que vivo acá y no es la primera vez que nos asaltan. En enero unas personas se hicieron pasar por empleados de la Municipalidad, me pidieron plata para comprar materiales, se la di y nunca más los vi. Estaban vestidos como operarios. Hice la denuncia, pero no pasó nada”. Por último, afirmó: “Hace un mes me preparaba para ir a trabajar, a las 8.30, y me saltaron arriba dos sujetos. Uno me agarró del cuello y me tapaba la boca, el otro me lastimó la mano para que soltara las llaves”.