Terror en Abasto: una mujer fue baleada en un intento de robo

Una familia de agricultores bolivianos vivió un enorme susto cuando un grupo de sujetos intentó entrar a los tiros en su vivienda. Al no poder ingresar, dispararon hacia el interior e hirieron en las piernas a la damnificada

Eran las nueve y media de la noche del sábado cuando Antonio salió a vigilar las plantas de sus quintas para evitar que se las comieran los conejos. En ese preciso instante, en 515 entre 198 y 199, una banda de sujetos entró por los invernaderos del vecino. “Me di cuenta de que había un ruido extraño, luego escuché un disparo y el perro se alteró. Entonces me apuré para entrar a mi casa y cerré la puerta. Los delincuentes quisieron ingresar, pero no pudieron”, dijo la víctima a Trama Urbana en la tranquera de su vivienda de Abasto, donde vive con su mujer y sus tres hijos.

El hecho más dramático ocurrió cuando los asaltantes, al no lograr forzar la puerta de entrada, dispararon varias veces hacia el interior e hirieron a su mujer. “Fueron dos tiros que le impactaron en las piernas. Uno de ellos le quedó alojado, pero por suerte está bien. Le dieron el alta en el Hospital de Romero y ya puede caminar”, contó el hombre, miembro de la comunidad boliviana, uno de los tantos quinteros que trabajan a sol y sombra en el campo, especialmente con frutas y hortalizas. 

El episodio duró un breve lapso de tiempo, pero la familia lo sintió como si hubiera sido un largo tormento. “Mis hijos (tres varones de 15, 10 y 8 años) lloraban, yo no sabía qué hacer, estábamos todos muy nerviosos y más cuando vimos a mi mujer que había sido herida por los atacantes. Por suerte, los delincuentes se fueron al rato, y entonces llamé a un vecino para que avisara a la Policía”, siguió relatando Antonio, quien refirió que los robos son frecuentes en la zona. 

“A mi hijo mayor le robaron el celular en la calle y a otra vecina le apuntaron para sacarle la cartera. No se puede vivir así. Tenemos mucho miedo, nosotros trabajamos todos los días, con poco descanso. Hay ocasiones en que nos replanteamos volver a nuestro país”, concluyó. 

Por el ilícito tomó intervención la comisaría Séptima a cargo del subcomisario Leandro Sarina, con el acompañamiento del comisario inspector Ignacio Rosales, jefe del Distrito Oeste. La causa quedó caratulada como “tentativa de robo y lesiones”.

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